GUADALAJARA.- Con los embalses de cabecera del Tajo a menos del 10 por ciento de su capacidad, reducidos a los lodos resultantes de una política trasvasista desmesurada y una sequía que no acaba con la llegada del otoño, se presenta en la provincia de Guadalajara, en concreto en la localidad de Alovera, un macroproyecto que 'vende' como principal atractivo la mayor playa artificial de Europa.
Una laguna de agua cristalina de 25.000 metros cuadrados que precisará 0,03 hectómetros cúbicos para su llenado, y en la que se anuncia no faltarán ni la playa de arena, ni el parque acuático con sus torres de toboganes ni su escuela de vela. Un proyecto para el que se anuncia una inversión privada de 15,6 millones sobre terrenos de titularidad municipal, pero que choca frontalmente con la imagen de los camiones cisterna llegando a localidades situadas a tan solo unos kilómetros para abastecer de agua potable a sus vecinos.
Dos realidades bien distintas para una misma provincia, en la que por una parte se lucha por mantener con vida la cabecera del Tajo y por otra se siguen proyectando grandes desarrollos ‑en este caso de tipo lúdico ligado al urbanístico‑ que giran en torno al agua.
'Alovera Beach', como se ha denominado el centro de ocio proyectado por el Grupo Rayet ‑entramado empresarial con fuerte vinculación y presencia en la provincia de Guadalajara‑, pretende convertirse en esa playa que Madrid tiene a más de 300 kilómetros, y de la que de materializarse esta iniciativa tendría a menos de una hora desde la Puerta del Sol. Un complejo a desarrollar sobre 104.182 metros cuadrados de terreno municipal, localizado en el sector Las Suertes, que con esta iniciativa se pretende recuperar.
Desde el Ayuntamiento aloverano ven este proyecto como "un sueño" que confían "en poco más de dos años se convierta en una realidad" y con el que dar "un gran impulso" al municipio. Así lo aseguraba durante la presentación en este municipio del Corredor del Henares su alcaldesa, Purificación Tortuero, quien acompañada por el presidente del Grupo Rayet, Félix Abádanes, ofrecía los detalles de este macroproyecto en un acto celebrado en el salón de plenos del Consistorio la semana pasada.
Previamente se había realizado en Madrid otra presentación, en la que se desvelaron otros datos de esta iniciativa, como la construcción de un aparcamiento con capacidad para un millar de vehículos, y la capacidad máxima del complejo, que se situará entre 8.000 y 10.000 personas.
Cifras que llevan a pensar no solo en la cantidad de agua que se precisará para el llenado de la laguna artificial, sino también en todos los consumos asociados a un centro de las dimensiones y las características del anunciado. Dudas lógicas a las que los promotores también tratan de dar respuesta recordando que el sector en el que se prevé la construcción de este complejo tiene asignado un suministro anual de 1,8 hectómetros cúbicos, de los cuales tan solo 0,03 irán destinados a llenar la laguna artificial, algo que ‑aseguran‑ habrá que realizar solo una vez.
Así lo aseguraba el director general de Crystal Lagoons, Francisco Matte, quien apuntaba que el llenado se realizaría en los meses de invierno o primavera, cuando las necesidades de riego agrícola son menores y se abre la posibilidad a realizar un estudio de aguas del subsuelo. Sea una u otra la forma de llenado, subrayaba que no afectaría al suministro normal de los vecinos.
Argumentos que desde el Ayuntamiento de Alovera se dan por buenos, y que vienen a sumarse al hecho de que la iniciativa no supondrá ningún coste para las arcas municipales ‑salvo aportar los terrenos correspondientes a esta parcela destinada a equipamiento‑, pero que sí le reportará un canon anual por el uso de los mismos. Una cifra aún sin precisar y que será objeto de negociación en los próximos meses.
Además de este beneficio económico para la localidad, se prevé que sean más de 300 puestos de trabajo directo e indirecto los que genere esta iniciativa, según la alcaldesa "un valor añadido para los jóvenes y no tan jóvenes de Alovera".
Razones que llevaban al Pleno municipal a dar luz verde al proyecto tan solo nueve días antes de que fuera presentado. Una idea que ahora deberá ser plasmada en un pliego de condiciones de cara a la adjudicación de las obras, proceso al que podrán concurrir las empresas que así lo deseen. Se estima que estos trámites administrativos se extenderán durante un año, aproximadamente, por lo que confían que el centro, con su playa, podría estar funcionando en 2020.
El promotor de esta iniciativa, Félix Abádanes, defiende el concepto "innovador" de esta propuesta, con la que Alovera se transformará, posicionándola "en el mapa europeo de la tecnología, la innovación y la sostenibilidad", así como "referencia única en actividades al aire libre".
La conexión con Madrid y con todos los municipios del Corredor del Henares está garantizada a través de la A-2, desde la que los promotores plantean tener un acceso directo al parque de ocio.
LA JUNTA VIGILARÁ QUE NO SE PONGA EN RIESGO EL ABASTECIMIENTO DE AGUA
Pero no todo está hecho en este proyecto, puesto que deberá cumplir con todos los requisitos legales y, además, no poner en riesgo el abastecimiento de agua en la zona. Factores sobre los que el Gobierno regional estará muy pendiente, tal y como aseguraba el pasado miércoles la consejera de Fomento, Agustina García Élez, al ser preguntada al respecto por el portavoz de Podemos en las Cortes, David Llorente, durante la Comisión de Economía y Presupuestos.
Tras asegurar que del proyecto únicamente conocía lo publicado en la prensa, la consejera señalaba respetar la iniciativa privada, pero advertía que habrá que verlo como cualquier otro proyecto de los que se quieren instalar en la región.
Escueta respuesta la ofrecida desde el Ejecutivo regional, que contrasta si se compara con la dada ante otras iniciativas de grandes parques de ocio planteados para otros puntos de la región también en el último año, como es el caso del parque temático de carácter histórico ‘Puy du Fou’ proyectado para Toledo. Una iniciativa que también suscitó polémica a propósito del agua necesaria para su abastecimiento y para el llenado del lago artificial que también contempla.
Para Llorente la intención de construir en Guadalajara la mayor playa artificial de Europa es "un megaproyecto monstruoso e insostenible", al tiempo que lamentaba que no se haya aprendido nada de los peores años de la burbuja inmobiliaria.
Asimismo se preguntaba si en Alovera, una localidad a 50 kilómetros de Madrid y con cerca de 12.400 habitantes, no hacen falta otras cosas, como por ejemplo, un apeadero de Renfe.
También desde Podemos, la diputada María Díaz, registraba el pasado jueves una pregunta parlamentaria en las Cortes para conocer la valoración del Gobierno regional, en concreto de la Consejería de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, sobre el proyecto 'Alovera Beach' y las posibles consecuencias del mismo sobre el territorio.
