TOLEDO.- El PSOE ganaría las elecciones en Castilla-La Mancha si hoy se celebrasen los comicios y lo haría sacando casi nueve puntos de ventaja al PP de María Dolores de Cospedal. Así se desprende de la encuesta elaborada por Ágora Integral/Celeste‑Tel para los socialistas, a través de 1.950 entrevistas telefónicas entre censados en la región.
Encuesta según la cual el PSOE de Emiliano García-Page aumentaría su porcentaje de votos un 1,1 por ciento respecto a la anterior cita electoral, pasando del 36,1 al 37,2 por ciento, lo que se traduciría en una horquilla de entre 14 y 17 escaños, frente a los 15 obtenidos en las autonómicas de 2015. Podría estar así rozando la mayoría absoluta que, hoy por hoy y puesto que ya parece complicado que se plantee una reforma de la ley electoral de aquí al próximo año, se encuentra en los 17 diputados.
Por su parte, el Partido Popular, que todavía no ha aclarado quién será su candidato a la cita de mayo de 2019, perdería casi 9 puntos porcentuales de sufragios, pasando del 37,5 por ciento obtenido hace tres años, al 28,6 por ciento. Un resultado que, de producirse ahora, les haría perder cinco de los 16 diputados con los que cuentan actualmente en el Parlamento castellano‑manchego.
Según este sondeo, al que ha tenido acceso PeriódicoCLM, los conservadores perderían un escaño en cada una de las provincias, que en el caso de provincias como Guadalajara, Toledo o Ciudad Real, podrían ir a parar al partido de Albert Rivera.
Y es que Ciudadanos se convertiría, en caso de celebrarse hoy las elecciones autonómicas, en la tercera fuerza política con representación en las Cortes regionales. Según esta encuesta, la formación naranja prácticamente duplicaría el porcentaje de votos obtenidos en la última cita electoral, pasando del 8,6 por ciento de 2015 al 16,8 por ciento. Lo cual le daría una horquilla de entre 4 y 6 diputados. C’s entraría así por primera vez en el Parlamento autonómico, después de que en las anteriores elecciones se quedara a las puertas de hacerlo.
Por su parte, los actuales socios de Gobierno del PSOE, Podemos ‑cuyo apoyo permitió la investidura de Page‑ perderían 0,7 puntos en el porcentaje de votos respecto a 2015, obtendrían entre 1 y 3 diputados, que según esta encuesta dependerían de los resultados en las provincias de Toledo y Albacete, en las que se lo disputarían con PSOE y C's en la primera, y con los socialistas en la segunda.
Según este sondeo, Izquierda Unida volvería a quedarse fuera de las Cortes, pues, aunque experimentaría un aumento del porcentaje de votos respecto a 2015, pasando del 3,1 al 3,7 por ciento, no conseguiría obtener representación.
EL PP SE 'ESTRELLARÍA' EN CIUDAD REAL
Por provincias, los socialistas liderados por Emiliano García-Page se impondrían en porcentaje de votos en todas ellas. De llevarse a cabo ahora los comicios autonómicos, el PSOE se convertiría en la fuerza más votada en las cinco provincias castellano‑manchegas, superando ampliamente al PP de Cospedal, con diferencias de entre 6 y 12 puntos.
Según la encuesta de Celeste‑Tel, cuyo trabajo de campo se realizaba entre el 1 y el 22 de marzo, y para la que se otorga un nivel de confianza del 95,45 por ciento y un error muestral de +/- 2,26 por ciento, la provincia de Ciudad Real seguiría siendo feudo socialista, aumentando en 2 puntos los votos recibidos en 2015, lo que haría conservar sus 4 diputados. Frente a ello un Partido Popular ‑dirigido por Francisco Cañizares‑ que sufriría el mayor descalabro de confirmarse estos resultados, al perder más de un 9 por ciento de los votos (de 37,1 por ciento pasaría al 27,9 por ciento), lo que conllevaría la pérdida de un diputado, que lo sumaría Ciudadanos.
La provincia de Guadalajara sería la única en la que los socialistas verían reducido ligeramente su porcentaje de votos, dejando el 0,6 por ciento en el camino, aunque no le haría perder sus 2 diputados. Quien sí lo haría sería el PP, que pasaría a tener solo 1 diputado si, como recoge el sondeo, sus votos se redujeran en un 10,2 por ciento.
El principal beneficiado en esta provincia sería Ciudadanos, que pasaría del 12 por ciento de votos obtenido en 2015 al 21,9 por ciento, consiguiendo así un diputado.
Por su parte en la provincia de Cuenca, la caída del PP de Benjamín Prieto sería también significativa, pasando de obtener el 41,5 por ciento de los votos en 2015 al 30,8 por ciento, lo que les haría perder un escaño que podría 'recoger' Ciudadanos. Por su parte los socialistas mejorarían sus resultados en más de 2 puntos, y podrían llegar a hacerse con un tercer escaño.
En la provincia de Albacete el PSOE se posicionaría como principal fuerza política, con el 34,2 por ciento de los votos, frente al 28,3 por ciento que obtendrían los ‘populares’ de celebrarse ahora las elecciones autonómicas. Y es que, según esta encuesta, mientras que el PSOE crecería ligeramente ‑a pesar de lo cual tendría en duda uno de los tres diputados con los que cuenta actualmente‑, el PP se dejaría en las urnas más de un 8 por ciento de votos, lo que les haría perder un diputado. Escaño que iría para Ciudadanos, que crece más de 8 puntos, mientras que el parlamentario socialista podría derivarse hacia la formación morada.
Finalmente, en la provincia de Toledo, los ‘populares’ presididos por José Julián Gregorio perderían también 8 puntos en porcentaje de votos, lo que les costaría uno de sus cuatro diputados regionales. Para el PSOE, que superaría al PP en votos ‑aumentando también en más de 2 puntos sus resultados de 2015‑ la horquilla de escaños se situaría entre 4 y 5.
La tercera fuerza política en la provincia sería Ciudadanos, que podría obtener hasta 2 escaños, después de duplicar prácticamente los resultados obtenidos en 2015. Por su parte Podemos podría perder el escaño que hoy ocupa María Díaz, al contemplar esta encuesta una pérdida de casi un punto en porcentaje de votos.
PAGE, MÁS CONOCIDO Y MEJOR VALORADO
Pero esta encuesta realizada para el Partido Socialista no solamente hacía referencia a la intención de voto, sino que a las 982 mujeres y 968 hombres encuestados también se les preguntaba por el conocimiento y la valoración que de los líderes de los dos principales partidos de la región.
Cuestiones ambas en las que se impone el secretario general de los socialistas y actual presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, que es conocido por el 96,6 por ciento de los encuestados, frente al 94,8 por ciento obtenido por la presidenta del PP regional, ministra de Defensa y expresidenta autonómica, María Dolores de Cospedal.
Respecto a la valoración, García-Page aprueba con un 5,2, frente al 3,2 que obtiene Cospedal. Según este sondeo, el socialista obtiene la mejor calificación entre el grupo de edad de entre 45 y 64 años, mientras que la ‘popular’ lo hace entre los de 65 años y más. Quienes peor valoran a Cospedal son los que tienen entre 31 y 44 años, según estos datos.
