El sector crítico del PP da la cara y no descarta forzar el congreso extraordinario

  • Miembros de la corriente crítica del Partido Popular de Castilla-La Mancha se han presentado hoy en Toledo para demostrar su existencia y volver a reclamar una renovación real en la formación.
  • Aseguran que Madrid ”está al tanto” de sus reivindicaciones e insisten en que la dirección nacional que lidera Pablo Casado ”está con las bases”.
  • Confían en que Núñez convoque ”por sí solo” el congreso extraordinario que reclaman, aunque de no hacerlo están dispuestos a forzar su celebración.

TOLEDO.- El sector crítico del Partido Popular en Castilla-La Mancha existe, cuenta cada vez con más apoyos -aunque aún con recelo por miedo a posibles represalias- y sigue reclamando una verdadera renovación en la formación, y no lo que ha sucedido en las dos últimas citas congresuales.

Cuestiones que han querido dejar claras este jueves en Toledo, donde han ofrecido una rueda de prensa en la que su portavoz y miembro del Comité Provincial del PP de Albacete, Antonio Martínez Iniesta, ha asegurado que Madrid está ”al tanto” de la situación y que ”está con las bases”.

Afirmaciones que realizaba tan solo un día después de que el presidente regional del partido, Francisco Núñez, negase la existencia de un sector crítico en el seno del PP castellano-manchego que reclamase la convocatoria de un congreso regional extraordinario.

Una corriente que hoy daba la cara en Toledo y que se ve como ”una revolución de las bases y de la afiliación”. Unas bases, recordaba Martínez Iniesta, que ”siempre ha defendido” el presidente nacional del partido, Pablo Casado.

Martínez, que fue uno de los principales apoyos de Casado en la región durante el proceso de primarias frente a quienes apoyaban -y hoy niegan- a Cospedal, ha reconocido que al corriente de este movimiento está también el vicesecretario de Política Autonómica y Local del PP y exsecretario general del PP regional, Vicente Tirado, quien ”como cualquier otra persona de la dirección nacional que rodea a Pablo Casado, está con las bases”.

Corriente que ya venía reclamando una auténtica renovación en el partido, pero que ha intensificado su petición tras las elecciones del pasado 26 de mayo, cuyos resultados pusieron de manifiesto que los castellano-manchegos ”no confían” en el actual proyecto político del PP ni en sus dirigentes. De ahí que insistan en la celebración de un congreso extraordinario ”inminentemente” de modo que quien lidere el partido, tenga cuatro años por delante para preparar unas elecciones autonómicas ”con garantía” y ”devolver al PP a las cotas más altas, de las que nunca debió bajar”.

Un congreso extraordinario que este sector crítico confía en que convoque ”por sí solo” el presidente del PP regional, en un ”gesto de generosidad” con la afiliación, aunque de no hacerlo -ha advertido Martínez Iniesta- recogerán firmas para forzar su celebración.

Y es que para quienes reclaman este congreso extraordinario, la renovación del partido que según Núñez ya se ha producido, no es más que un ”desastre”, que se ha traducido en que el Partido Socialista se haya hecho con el gobierno de las cinco diputaciones provinciales, de las cinco capitales de provincia y de trece de los dieciséis municipios con más de 20.000 habitantes, un ”diez a cero” a favor de los socialistas.

Resultados que según Martínez no responden tanto a los logros socialistas, sino a que ”el PP no es capaz de mantener un proyecto político que haga frente al bajo nivel del PSOE”.

En este sentido, el portavoz de este sector crítico de los populares castellano-manchegos ha subrayado que, a diferencia de otras comunidades autónomas, en Castilla-La Mancha no se ha producido el cambio impulsado por Pablo Casado y se ha preguntado a qué llama Núñez renovación, ”cuando la estructura sigue siendo la misma de etapas anteriores”.

Por ello asegura que es ”un clamor” en la región la petición de convocatoria de un congreso extraordinario. Un movimiento del que forman parte alcaldes, concejales, portavoces de juntas locales, miembros del Comité Ejecutivo regional y de los comités ejecutivos provinciales, aunque ha admitido que ”a la gente le cuesta significarse porque hay presiones”.

Quienes no han tenido problema en hacerlo han sido quienes han estado hoy acompañando a Martínez en la rueda de prensa celebrada en un conocido hotel toledano. Entre ellos Silvia León Murillo, responsable del área de Justicia en el Comité de Dirección del PP de Ciudad Real; Diego García-Baquero, miembro de la candidatura municipal del PP de Alcázar de San Juan; Pablo Escobar, alcalde de La Herrera (Albacete), junto a los que han acudido también exconcejales y militantes de base de distintos puntos de la región.

Preguntado por cuántas personas componen este sector crítico y si cuenta con el apoyo de populares como Antonio Román, Rosa Romero, Carlos Velázquez o Benjamín Prieto, Martínez ha señalado que hay quien tiene miedo ”porque puede haber represalias”, a pesar de lo cual ha anunciado que en próximas fechas se irán dando a conocer nombres de quienes apoyan este movimiento, y entre quienes ”habrá sorpresas”.

En esta línea, y preguntado sobre si estaría dispuesto a liderar una candidatura o apoyar la del exalcalde de Seseña, Carlos Velázquez -quien se enfrentara a Núñez en las primarias para optar a la Presidencia regional del partido-, Martínez ha señalado que lo principal es el congreso y que a partir de ahí se vería ”quién es el candidato, cuántos hay o si hay una lista de integración”.

No obstante, Martínez ha insistido en la necesidad de renovar ”personas y proyecto”, también en las candidaturas locales.

Respecto a la dirección regional, ha considerado que se encuentra ”en estado de schok”; en ella ”nadie asume responsabilidades, miran para otro lado”, mientras que en otros ámbitos, como a nivel nacional, el PP ha alcanzado pactos y alianzas con Ciudadanos, algo que se pregunta por qué no ha sido posible en Castilla-La Mancha.

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