CUENCA.- El Gobierno regional ha acogido con satisfacción la marcha atrás de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) en su planteamiento de priorizar la enseñanza a distancia de cara al inicio del próximo curso, y consideran que "una rectificación no viene mal".
Así lo ha señalado el vicepresidente del Ejecutivo autonómico, José Luis Martínez Guijarro, durante la rueda de prensa que ha ofrecido en la Delegación de la Junta de Comunidades en Cuenca, en la que preguntado al respecto ha apuntado que "rectificar es de sabios".
En este sentido, Martínez Guijarro ha manifestado su convicción de que el rector de la UCLM, Miguel Ángel Collado, "se ha equivocado mucho" durante esta crisis sanitaria, algo de lo que "es consciente y lo sabe", por lo que una rectificación sobre esta decisión "no viene mal".
Dicho esto, el vicepresidente regional ha considerado que la UCLM no se puede convertir en semipresencial, sino que "tiene que ser presencial", sin quitar esto que pueda tener alguna titulación que se imparta a distancia.
"Su base es presencial, así se diseñó", ha insistido Martínez Guijarro. Y es que, ha recordado, la institución se planteó como instrumento "para vertebrar la región", algo que requiere "la presencia física de los alumnos y los profesores", ha subrayado el vicepresidente.
Valoraciones que ha realizado después de que el rector anunciara este lunes, a través de un mensaje publicado a última hora en su perfil de Twitter, que el documento de planificación del próximo curso académico 2020/2021 que apostaba preferentemente por las clases no presenciales, quedaba "retirado".
Una decisión que justificaba señalando que dicho documento no recogía "adecuadamente" la estrategia de la UCLM. Por eso avanzaba que "se reelaborará" conforme a unos nuevos criterios que apuesten "por la máxima presencialidad".
Asimismo en un escrito enviado a los miembros de la comunidad universitaria, al que ha tenido acceso Efe, el rector señala que el documento abierto a consulta pública el pasado 2 de junio no recogía adecuadamente la estrategia de la Universidad, lo cual ha generado confusión entre la comunidad universitaria y la sociedad.
En un contexto que "cambia rápidamente" y sobre el que en los próximos días quedarán definidos condicionantes básicos para realizar la planificación del próximo curso académico, "corresponde retirar el documento inicial y reelaborarlo de acuerdo con el nuevo contexto y la estrategia de la Universidad", ha señalado.
Del mismo modo señala que las sugerencias recibidas hasta el momento serán tenidas en cuanta en la elaboración del nuevo documento, así como aquellas que pudieran encontrarse en curso, las cuales a partir de este momento pueden ser remitidas directamente a la vicerrectora de Docencia, María Isabel López Solera.
Precisamente este Vicerrectorado hacía públicos hace unos días los criterios generales para la planificación del curso 2020-2021 al objeto de que la comunidad universitaria pudiera participar con sus propuestas en la apuesta por un nuevo curso con modelo bimodal.
Este preveía compaginar la presencia de estudiantes en prácticas, evaluaciones y clases alternas, con seguridad y certificación de calidad, con clases virtuales en hiperaulas y escenarios mixtos con tecnología.
RECONSIDERACIÓN
Una rectificación que se producía después de que el Gobierno de Castilla-La Mancha sugiriese a la UCLM la reconsideración de su documento de trabajo, "siempre con la directriz de que la salud y la seguridad deben ser prioritarias", pero planteando "una vuelta en septiembre basada en la máxima presencialidad posible, en línea con lo que se está trabajando para la educación no universitaria".
Esto conlleva que se tengan que establecer protocolos sobre el uso de espacios, establecimiento de aforos, materiales de protección y planes de contingencia que permitan, en caso de un empeoramiento del escenario, "pasar de forma rápida y efectiva a otras estrategias más basadas en la modalidad online".
Recomendaciones que han sido atendidas por el rector de la UCLM, y que evitan así un nuevo encontronazo entre el Ejecutivo de Emiliano García-Page y Collado, después del ocurrido al inicio de la crisis sanitaria.
Cabe recordar que el rector de la UCLM, sin la autorización del Gobierno regional, decretaba la suspensión de las clases presenciales. Algo que fue duramente reprochado desde el Ejecutivo autonómico, desde el que se le acusó de "ir por libre", y que llevó incluso al presidente García-Page a plantear que esta actuación unilateral y sin atender las directrices de la Junta llevarían a una revisión en profundidad del contrato-programa.
Una tensa situación que ha seguido latente a lo largo de esta crisis generada por la COVID, y que ahora vuelve a la primera línea.
