Los vándalos que dañaron las pinturas rupestres de 'La Rendija' son menores de edad y usaron rotulador permanente

Las diligencias instruidas por la Guardia Civil han sido puestas en conocimiento de la Fiscalía de Menores de Ciudad Real.
Algunos de los grafitis del acto vandálico en el abrigo de 'La Rendija', en Herencia (Ciudad Real). — GUARDIA CIVIL
photo_camera Algunos de los grafitis del acto vandálico en el abrigo de 'La Rendija', en Herencia (Ciudad Real). — GUARDIA CIVIL

CIUDAD REAL.- La Guardia Civil ha logrado identificar a los autores que el pasado mes de enero vandalizaron las pinturas rupestres del abrigo de 'La Rendija', situadas en la localidad ciudadrealeña de Herencia y, después este ataque, en proceso de ser declaradas Bien de Interés Cultural.

Se trata de tres menores que emplearon un rotulador permanente para dibujar numerosos grafitis obscenos y escribir garabatos con nombres propios, como "Aki stubo Josue" [sic], "David" y "Jesús".

El instituto armado ha explicado en un comunicado de prensa que su Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) tuvo conocimiento de las pintadas vandálicas a través de la Consejería de Educación, Cultura y Deportes, desde la que temían que se hubieran causado daños permanentes a las pinturas prehistóricas allí existentes.

El Seprona realizó una inspección exhaustiva de la cueva, constatando que en su interior había "numerosas pintadas realizadas con rotulador indeleble".

Después de realizar varias gestiones, los agentes han determinado que los autores de las pinturas son tres personas de corta edad, poniendo el asunto en conocimiento de la Fiscalía de Menores de la Audiencia Provincial de Ciudad Real.

El abrigo se encuentra en una gruta natural abierta de la sierra de la Sevillana, bajo el cerro del Tocón, en el término municipal de Herencia, situado a ocho kilómetros del núcleo urbano y a 4,7 de Puerto Lápice.

En sus paredes interiores y en techo guardan valiosas obras rupestres, la gran mayoría pertenecientes al arte esquemático, pintadas con tintas planas de diversas tonalidades de rojo y en negro.

Los motivos representados son figuras antropomorfas, en las que se pueden apreciar pequeños detalles como los dedos de las manos y los pies, además de diferentes tipos de animales y figuras sin determinar.

Varios especialistas de la Viceconsejería de Cultura están trabajando en la cueva para determinar si se pueden limpiar las pintadas, algo que "todavía no es seguro". En caso de poder realizarse la reversión, el Gobierno regional también actualizará el estudio que existe sobre el emplazamiento.

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