Genocidio y sicarios, el lenguaje del PP en las Cortes contra los socialistas por desmantelamiento del tren en Cuenca

En reiteradas ocasiones, el presidente del Parlamento autonómico, Pablo Bellido, ha pedido la retirada de ambas expresiones pero la diputada del PP María Roldán no ha consentido.
Intervención desde su escaño de la diputada del PP María Roldán. | CARMEN TOLDOS

TOLEDO.- Bronco debate en las Cortes. La que es la casa de todos los castellanomanchegos y la sede del debate parlamentario de los representantes de los ciudadanos de la región ha sido escenario de la tensión política entre los dos partidos mayoritarios que se ha saldado con acusaciones de "genocidio" y "sicarios" del PP al PSOE, que el primero no ha consentido retirar.

Ha ocurrido durante el debate en el pleno de las Cortes regionales de una Proposición No de Ley (PNL) relativa a la modificación de las obligaciones del servicio público sobre la línea de ferrocarril 310 Madrid-Cuenca-Valencia, presentada por el grupo popular. Pero el desmantelamiento del tren en Cuenca por el que tanto protestan los ciudadanos de esta provincia ha dado lugar a unas acusaciones del grupo mayoritario de la oposición al PSOE que han levantado ampollas entre sus diputados.

Y es que durante su intervención, la diputada regional del PP María Roldán ha dicho que lo que se está haciendo con el tren de Cuenca es un "genocidio" y que el comportamiento de los socialistas es el de unos "sicarios" que cometen el "delito" de cerrar la línea ferroviaria y cobran sueldo.

Invocando el artículo 93 del Reglamento de las Cortes, en concreto el artículo 93.3. para tomar la palabra en medio del debate, el presidente del grupo parlamentario socialista, Fernando Mora, ha pedido a la diputada 'popular' que retirase las palabras "ofensivas" hacia los socialistas de "sicarios y genocidas", que no se corresponden con un debate sobre el tren a Cuenca. Le ha espetado que no entendía "a qué está jugando" y por qué utilizaba esas "palabras gruesas e insultos".

"No sé si quieren que se les oiga algo más", ha afirmado Mora visiblemente molesto, para a continuación decir que el uso de ese lenguaje es "improcedente" y no respeta el buen decoro de la Cámara, por lo que le ha pedido "por favor" que las retire.

Aún así, constarán en el diario de sesiones porque Roldán no ha consentido retirarlas y ha precisado, desde su escaño, que en ningún momento ha llamado "genocidas" a los socialistas sino que lo que ha dicho es que lo que se están haciendo con el desmantelamiento del tren en Cuenca es un "genocidio". La Real Academia Española (RAE) lo define como 'aniquilación o exterminio sistemático y deliberado de un grupo social por motivos racionales, políticos o religiosos'.

Es más, ha incidido en que no lo retira porque "es así" y porque así lo piensa, al igual que el PP, la mayoría de la sociedad conquense.

Respecto a los de "sicarios", Roldán ha justificado haber utilizado esta palabra "dando a entender que los sicarios, ustedes los socialistas, han cometido el delito de cerrar la línea y tienen sueldo, como los sicarios que trabajan a sueldo".

Una explicación que no ha convencido tampoco al presidente de las Cortes, Pablo Bellido, que en primer lugar ha manifestado que tendrá que revisar lo que dice la RAE sobre el término sicario pero, en todo caso, "como suena, es una expresión enormemente grosera y desproporcionada para un parlamento", así como ha puesto en duda que esta palabra tenga alguna acepción para utilizarla en este contexto.

La RAE es clara, sicario significa 'asesino asalariado'. Y sin consultar esta definición pero aprovechando que concluía el debate, Bellido ha vuelto a ofrecer a la parlamentaria del PP que retirara sus palabras y ha aludido al respeto y aprecio que le tiene, a que "no quedarán bien en el diario de sesiones" y a que, en su opinión, no la representan ni están a su altura intelectual y a la educación con la que suele hablar en sus intervenciones.

Porque en otras ocasiones los 'populares' se han sentido ofendidos al mismo nivel que los socialistas en esta ocasión y porque está convencida de no ha faltado al respeto ni acusado a ningún diputado del PSOE, Roldán cree que se ha hecho demasiado "bombo" con el tema y se ha negado una vez más a retirar las palabras en cuestión.

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