TOLEDO.- De los embalses de la cabecera del Tajo volverán a salir rumbo a Levante otros 16 hectómetros cúbicos de agua, de los cuales más de la mitad irán destinados al regadío. Un nuevo trasvase que ha sido autorizado este viernes por la Comisión Central de Explotación del Acueducto Tajo-Segura, dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica, y que contempla también 7,5 hectómetros cúbicos para abastecimientos urbanos.
Una decisión en la que si bien no se ha apurado al máximo permitido para la situación hidrológica excepcional (nivel 3) que presenta el sistema, puesto que se podrían haber llegado a autorizar, de forma discrecional pero motivada, hasta los 20 hectómetros cúbicos, el volumen se ha reducido en previsión de que el sistema se mantendrá en esta situación durante todo el trimestre, así como el próximo semestre completo.
Según los datos recogidos en el informe de situación analizado por esta comisión, y atendiendo a los datos facilitados por la Confederación Hidrográfica del Tajo, a fecha 1 de junio el volumen embalsado en la cabecera del Tajo era de 750,7 hm3, y el volumen autorizado a trasvasar pendiente de enviar ascendía a 118,1 hm3, de modo que el volumen del embalse efectivo se situaba en 632,6 hm3.
Para ello se ha tomado como referencia también el volumen de agua trasvasada disponible en la cuenca del Segura, tanto para abastecimientos como para regadíos, que asciende a 19,71 hectómetros cúbicos; así como el volumen ya autorizado y aún pendiente de trasvasar para esos usos, en total otros 112,1.
De este modo, aplicando los principios de prevención y precaución que deben presidir toda acción de las Administraciones Públicas, considerando las reservas de agua trasvasada disponibles en la cuenca del Segura y los pendientes de trasvasar, así como la reducida estimación de aportaciones para los meses de verano -en mayo únicamente fueron 59,1 hm3-, junto a las previsiones de consumos tanto en abastecimientos como en regadíos, se ha considerado lo adecuado autorizar para el mes de junio un trasvase de 16 hectómetros cúbicos, de los cuales 8,5 se destinarán a regadíos.
Cabe recordar que a finales de mayo la Comisión de Explotación daba luz verde a otra derivación de agua a través del acueducto Tajo-Segura de 20 hectómetros cúbicos, el máximo permitido para el nivel 3. Un trasvase del que 12,5 hectómetros cúbicos se contemplaban para el regadío, mientras que el volumen reservado para los abastecimientos urbanos se mantenía en 7,5 hectómetros cúbicos.
En total, de enero a mayo, el volumen de trasvase autorizado asciendía a 191 hectómetros cúbicos, de los cuales 185 para el Segura y 6 para el Guadiana -la mitad para recuperar Las Tablas y el resto para las pruebas de puesta en marcha de la Tubería Manchega-, a los que ahora se suman otros 16 hm3, de modo que el resto trasvasable hasta el máximo anual es de 443 hectómetros cúbicos.
Aunque en esta ocasión el trasvase al que se ha dado luz verde no alcanza el máximo permitido, esto no significa que en los próximos dos meses se pudiera llegar hasta ese volumen de 20 hectómetros cúbicos, puesto que en el informe de situación se señala que sí se podría estar en disposición de derivar entre junio y agosto un total de 60 hm3.
QUE NO SALGA HASTA SEPTIEMBRE
Por su parte desde la Asociación de Municipios Ribereños, que consideran la autorización de este nuevo trasvase una "noticia funesta" con la que comenzar el verano, piden que el agua no salga hacia el Levante hasta el mes de septiembre.
Confían en la "buena voluntad" del Ministerio para la Transición Ecológica para dejar el agua en los embalses de cabecera hasta pasado el verano y así poder sostener la temporada turística.
Junto a ello, y aunque agradecen al Ministerio que se haya reducido en 4 hectómetros cúbicos el trasvase propuesto por la "absurdamente burocrática" Comisión de Explotación, consideran que no debería enviarse "ni una sola gota para regadío".
Los Ribereños consideran que en cualquier caso el trasvase autorizado es "excesivo" tanto para la situación de los embalses como para la "necesidad real" de una Región de Murcia que "lidera el ranking de precipitaciones durante los últimos tres años".
Así piden al Ministerio que "al menos nos dejen disfrutar del agua en verano", al ser esta "la única oportunidad de ser competitivos de cara al turismo". Así lo ha defendido la presidenta de la asociación, María de los Ángeles Sierra, quien subraya que esta es una necesidad para los vecinos y las empresas que "ven cómo los embalses se vacían a ritmo de bañera".
Por su parte el vicepresidente de los Ribereños, Borja Castro, recuerda que para estos municipios "el agua significa vida" y que es "la mejor herramienta de esta España vaciada para luchar contra la inercia y mantener con vida nuestros pueblos".
Un medio con el que apostar por un desarrollo sostenible y en sintonía con el medio ambiente, "muy alejado de la cultura del pelotazo urbanístico y agrícola de la Región de Murcia, cuya última ocurrencia ha sido proyectar un Mar Menor artificial a escasos metros del verdadero", ha recalcado Castro, "que ya no saben cómo compatibilizar con la supervivencia de su insostenible modelo de producción agrícola industrial".
