El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, junto al jefe del Gobierno central, Pedro Sánchez, en el acto que celebró el PSOE el pasado jueves, en Toledo. - EVA ERCOLANESE

CUENCA.- El presidente de Castilla-La Mancha y secretario regional del PSOE, Emiliano García-Page, ha vuelto a reafirmar hoy su lealtad al partido y ha asegurado que siempre apoyará al candidato de su partido, pero que deberán dejarle hacerlo "con mi método y con mis modales, porque llevo 30 años ganando al adversario".

Así lo ha señalado este jueves durante la presentación del proyecto empresarial para la construcción de un parque temático ecoturista en Cuenca, donde ha precisado que esto no es incompatible con "llevarse bien con la gente". "No me gustan los insultos, prefiero la moderación y los acuerdos", ha recalcado García-Page, después de que durante los últimos días hayan sido numerosas las críticas recibidas de propios y extraños, tras desmarcarse de las palabras del presidente Pedro Sánchez en relación al líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, y su solvencia política, y poner en duda, de nuevo, la conveniencia para los socialistas de tener como socios en el Gobierno a Unidas Podemos.

Del mismo modo, se ha mostrado totalmente contrario a "una de las frases más desastrosas que se han predicado en este país, la del miedo tiene que cambiar de bando". En este sentido ha subrayado que trabaja "para que nadie tenga miedo, porque además el miedo es libre; el que quiera que lo entienda, lo demás es simplemente confundirnos", ha apostillado para quienes cuestionan sus palabras.

Un contexto en el que el presidente castellanomanchego también ha insistido en que mientras que él sea presidente, en Castilla-La Mancha "los intereses generales estarán siempre por delante de los intereses de mi partido y, por supuesto, por delante de los de todos los partidos juntos". Algo, ha precisado, que "no quiere decir que no quiera que gane mi partido".

Palabras que García-Page ha pronunciado apenas unas horas después de que el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, haya apelado a la responsabilidad que tiene el PSOE para afrontar de forma unida los problemas y proteger a la clase media trabajadora.

Una reflexión que hacía en el marco de una conversación informal con periodistas en Nueva York, donde participa en diversos actos en el marco de la apertura del nuevo periodo de sesiones de la Asamblea de la ONU, tras la polémica suscitada por las palabras de Page cuestionando la estrategia de pactos de su partido a nivel nacional.

Para el también secretario general del PSOE es muy relevante la imagen de unidad dada por el partido el pasado sábado en la reunión celebrada en Zaragoza, por lo que ha apelado a la responsabilidad y a seguir trabajando de forma unitaria en la respuesta a la crisis.

Una reacción más a la que se suma también la de otro barón socialista, el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, quien considera "injusto" que precisamente sea su homólogo castellanomanchego quien cuestione esto, pues él fue presidente autonómico en 2015 gracias a un pacto con Podemos.

Considera por ello "un poco contradictorio" que realice estas críticas -aunque en realidad no es la primera vez que el jefe del Ejecutivo castellanomanchego se pronuncia en esta línea empleando términos similares-, y en su opinión el debate abierto por García-Page "le importa bastante poco" a la sociedad, "sobre todo a la que no es de derechas", ha apostillado.

Pero Fernández Vara no se ha quedado ahí, sino que ha arremetido contra Page y su mensaje de lealtad al partido, puesto que para el extremeño "la lealtad no es solo decir lo que a cada uno se le ocurre en cada momento, sino ser consciente de que cuando hay una institución, como el PSOE, las cosas hay que decirlas entre nosotros".

Una cuestión que el presidente de Extremadura daba por zanjada pidiendo que no se pierda el tiempo "en debates inútiles que no aportan nada".