Castilla-La Mancha reconoce muertes de ganado por la enfermedad hemorrágica epizoótica y el sector pide ayudas

El Gobierno regional pide no minimizar los efectos, pero tampoco crear alarma entre los ganaderos, que reclaman para los afectados las mismas ayudas dadas en 2008 por la enfermedad de la lengua azul.
La EHE se transmite al ganado a través de mosquitos, lo que hace imposible controlar sus focos de dispersión. - ARCHIVO
photo_camera La EHE se transmite al ganado a través de mosquitos, lo que hace imposible controlar sus focos de dispersión. - ARCHIVO

CIUDAD REAL.- El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Sostenible de Castilla-La Mancha, Julián Martínez Lizán, ha reconocido que en algunas explotaciones ganaderas se han producido "incluso bajas" por la enfermedad hemorrágica epizoótica (EHE), si bien ha querido lanzar un mensaje de tranquilidad a los ganaderos porque "no afecta con una mortalidad muy importante ni a la caza ni a las vacas".

En declaraciones a los medios de comunicación con motivo de su visita a la cooperativa Jesús del Perdón-Bodegas Yuntero en Manzanares, el consejero ha analizado la evolución de esta enfermedad animal, que es la primera vez que se ha detectado en España y se transmite a través de los mosquitos, lo que hace "prácticamente imposible el poder controlar los focos de dispersión de la enfermedad".

Martínez Lizán ha abogado por ser "cautos, precavidos y no minimizar los efectos", aunque también ha pedido no "crear una alarma que pudiera preocupar al sector" y, por ello, ha indicado que se han dado instrucciones para hacer un monitoreo y un seguimiento de los posibles focos que pueda haber, siguiendo las prescripciones veterinarias de los servicios técnicos a nivel regional y nacional.

"Entendemos que cuando aparecen enfermedades nuevas son problemáticas", ha reconocido el consejero de Ganadería, que ha señalado que esta patología animal es similar a la lengua azul, si bien ha señalado que hasta el momento no hay tratamiento ni vacuna, aunque ha afirmado que los científicos ya trabajan en un antídoto para la enfermedad.

Asimismo, ha señalado que la Unión Europea también trabaja para controlar "de alguna manera los movimientos", sobre todo del "movimiento para vida" de los posibles animales afectados, pues ha recordado que la enfermedad del animal no se transmite al producto de consumo.

Y ha augurado que en los próximos meses puede "haber una dispersión importante" de esta enfermedad, toda vez que se transmite a través de mosquitos, que "pueden ser transportados por el viento durante mucho tiempo y a muchos kilómetros de distancia".

En cualquier caso, Martínez Lizán ha querido mandar un mensaje de tranquilidad al sector y ha comprometido que el Gobierno regional "va a estar al lado de los ganaderos para apoyarles en todo lo posible y facilitarles el desarrollo de su actividad".

COMO LA LENGUA AZUL

Por su parte, el presidente de Asaja Castilla-La Mancha, José María Fresneda, ha solicitado que se den a los ganaderos afectados por la enfermedad hemorrágica epizoótica las mismas ayudas que se dieron en el 2008 por la enfermedad de la lengua azul, ya que son dos casos "muy parecidos" y los ganaderos han de tomar medidas para cubrir las pérdidas económicas "por la muerte de cabezas".

En rueda de prensa, el presidente regional de Asaja ha destacado que esta enfermedad no afecta a los humanos "en ningún momento", pero ha advertido de que el ganadero se ve muy afectado porque tiene que matar a los animales que contraen la enfermedad.

En este sentido, Fresneda ha pedido un plan para la ganadería en Castilla-La Mancha y ha solicitado a la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural "trabajar juntos" para hacer esta actividad rentable para Castilla-La Mancha y sus ganaderos.

Según Fresneda, los ganaderos están "sufriendo mucho" y hay una "gran incertidumbre" ante un mosquito que pica a los animales y transmite la enfermedad, ante la que no se puede hacer nada porque no existe vacuna ni tratamiento.

A pesar de que no hay cifras concretas de los animales afectados, Asaja Castilla-La Mancha ha resaltado que todos los días están muriendo vacas y que ya hay varios focos identificados en las provincias de Albacete, Ciudad Real y Toledo.

Comentarios