TOLEDO.- ASAJA Castilla-La Mancha rechaza la propuesta de la Junta de Comunidades sobre la gestión de estiércoles de porcino, al considerar que es una salida "apresurada" con la que "contentar" a los grupos sociales y políticos contrarios a la ganadería intensiva ante el fin, el próximo 31 de diciembre, de la moratoria que ha estado limitando la autorización de nuevas explotaciones porcinas en la región.
Así lo ha señalado la organización de agricultores y ganaderos desde la que se han presentado alegaciones a una decena de artículos del nuevo Decreto de Gestión de Estiércoles de Porcino que la Consejería de Desarrollo Sostenible tiene previsto aprobar en los próximos meses, el cual consideran que de no modificarse tendrá "una grave repercusión" en las explotaciones porcinas de la región, así como "en la economía de cientos de agricultores que dependen del porcino para que actividad sea rentable".
Y es que para Asaja CLM la redacción del nuevo decreto se ha llevado a cabo en un marco de "celeridad y presión social" ante la finalización de la moratoria. Una medida aprobada en enero de 2022 con una vigencia de tres años, en los que no se admitirían solicitudes ni se concederían nuevas autorizaciones ambientales integradas para la instalación de explotaciones ganaderas de porcino en la región, como tampoco se admitirían modificaciones a las autorizaciones ya concedidas si suponían una ampliación de capacidad.
Una moratoria que, sin embargo, sí dejaba abierta la puerta a aquellos proyectos, tanto nuevos como de ampliación, que incorporasen sistemas tecnológicos para el tratamiento, valorización y separación de sólidos-líquidos de purines.
Desde la organización agraria consideran que esta moratoria "aplacó" a los grupos sociales y políticos contrarios a la ganadería intensiva y del sector porcino, aunque bien es cierto que entre quienes se oponen a la ganadería industrial también han sido durante este tiempo numerosas las críticas señalando el "coladero" en que se había convertido la medida.
Una moratoria que se encuentra ya casi en tiempo de descuento, y a poco más de cuatro meses para que expire el plazo contemplado, desde el Gobierno regional se trabaja en un decreto con el que plantear un nuevo marco para la gestión de los estiércoles del porcino.
Un planteamiento con el que desde Asaja CLM consideran que la Junta "se ve obligada a, de forma apresurada, seguir contentando a estos grupos, aunque sea en perjuicio de los agricultores y ganaderos". Y es que, aseguran, la moratoria "solo ha servido para complicar más la vida a los productores de porcino".
ALEGACIONES Y ACUSACIONES
Respecto a las alegaciones presentadas al nuevo decreto, la organización considera que la Junta "no ha tenido en cuenta datos irrefutables, basados en estudios técnicos que se están elaborando y que analizan la incidencia que el estiércol porcino tiene sobre el terreno".
En este sentido, apuntan, que la Universidad de Castilla-La Mancha, el Instituto Técnico Agronómico Provincial (ITAP) de la Diputación de Albacete y el propio sector están llevando a cabo un "minucioso estudio" en el que se analiza el comportamiento del purín como abono orgánico. Un estudio, aseguran, que "está arrojando interesantes resultados que la Administración conoce y que parece no quiere tener en cuenta a la hora de legislar".
Por ello desde el sector piden a la Junta "seriedad y coherencia", ya que "no puede, por un lado, apoyar con financiación que se realicen estudios científicos que están demostrando que el purín es una alternativa solvente a los abonos químicos y, por otro lado, prohibir su uso por ley".
Así, en el documento de alegaciones presentado por Asaja CLM se hace referencia a una decena de artículos entre los que destacan la ampliación de la intervención de los ayuntamientos en materia de aplicación de purines, algo que consideran "totalmente injustificado" ya que esta materia requiere de "un riguroso desarrollo técnico" al que las entidades locales no pueden llegar por la falta de medios y recursos.
De este modo, consideran que la aprobación del decreto tal y como está redactado supondría "un gravísimo perjuicio" para el sector porcino y para los agricultores y ganaderos que sobreviven gracias a esta actividad, además de colocar al sector productor en "una clara y grave situación de desventaja en comparación con otras regiones", aseguran.
En esta línea subrayan la "importancia" adquirida por el sector en la economía regional y recuerdan el "gran esfuerzo de modernización y adaptación de las granjas para reducir al máximo las debilidades y los impactos negativos" que se ha realizado.
Insisten además en "el valor" que el porcino tiene para la economía circular, al ser "los propios estiércoles que producen las granjas, los que los agricultores utilizan como abono orgánico para sus cultivos, prescindiendo de abonos químicos y reduciendo de forma considerable los gastos de su explotación".
Por otra parte, desde la organización agraria consideran al sector porcino "un aliado clave en la lucha contra la despoblación", puesto que "el 50 por ciento de las granjas se ubican en municipios de menos de 5.000 habitantes, generando empleo y riqueza donde más se necesitan". De ahí que crean que con el nuevo decreto "se obligará a jóvenes y explotaciones familiares al abandono de esta actividad".
Desde Asaja CLM esperan que la Junta tenga en cuenta sus alegaciones y "no se deje llevar por las presiones de grupos interesados" que, según la organización, "solo persiguen el fin de la ganadería industrial", aunque para ello "tengan que aportar datos falsos y sesgados que crean alarma social y rechazo hacia la actividad de agricultores y ganaderos".
Por último piden a la Administración que se acerque a la realidad del sector para poder conocer "verdaderamente" el manejo que realizan agricultores y ganaderos de la valorización del purín como fertilizante.
