CIUDAD REAL.- Las Tablas de Daimiel han comenzado ya a recibir, de manera continua, el agua procedente del trasvase Tajo-Segura a través del sistema de abastecimiento de la Llanura Manchega.
Agua que llega al parque nacional con un caudal de 300 litros por segundo, aunque este podrá variar atendiendo a las necesidades de las pruebas que se están llevando a cabo desde la Confederación Hidrográfica del Guadiana.
Un "gran paso", tal y como lo ha calificado el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, quien a través de las redes sociales ha informado sobre la llegada del agua a Las Tablas de Daimiel, adelantándose un par de días a las estimaciones que se habían realizado.
Esta transferencia de agua, que llega en auxilio de este humedal, gravemente afectado por la sequía y los efectos de la sobreexplotación de los acuíferos, era aprobada por la Comisión Central de Explotación del trasvase Tajo-Segura el pasado 28 de abril, como una medida "puntual y urgente", dentro del programa de recuperación hídrica del parque puesto en marcha el Ministerio.
Un aporte de agua que se contempló realizar a través del sistema de la Llanura Manchega, tratando así de garantizar un aporte más efectivo, y confiando así en una mejora en la situación del parque nacional, que se ha visto gravemente mermada en los últimos años.
Así lo ponía de manifiesto el informe técnico hecho público el pasado mes de mayo por la Comunidad de Usuarios de la Masa de Agua Subterránea de Mancha Occidental I, en el que se subrayaba el descenso de 2,20 metros que ha experimentado el nivel freático del acuífero en los dos últimos años.
Un informe que ponía de manifiesto los dos problemas a los que se enfrentan los usuarios de las aguas del acuífero del que se nutren Las Tablas de Daimiel, por un parte la sequía y por otra la falta de infraestructuras que, en momentos puntuales, puedan trasvasar agua de una misma cuenca o de otra para paliar la escasez de recursos.
Agua que ahora sí ha comenzado a llegar al parque nacional, contribuyendo así a su encharcamiento, aunque no se ha precisado cuál será el volumen total que recibirá.
