TOLEDO.- Cuenca, Talavera de la Reina, Albacete y Toledo han sido las ciudades elegidas por los cinco candidatos a presidir la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha para cerrar la intensa campaña electoral con la que han recorrido la región durante las dos últimas semanas, llevando sus propuestas para los próximos cuatro años.
Cierre de campaña para el que el PSOE ha elegido la ciudad de Cuenca, donde ante más de 2.000 personas, el candidato a la reelección, Emiliano García-Page, ha vuelto a ofrecer un gobierno "para todos" y ha solicitado "un voto de responsabilidad" para seguir construyendo una región modélica y evitar la entrada de Núñez con Vox.
"Os pido el voto para pararlos, para seguir cambiando esta región, para convertirla en una de las mejores: modelo en Sanidad, en Educación, en infraestructuras, en sostenibilidad, la principal en la lucha contra el despoblamiento", ha resumido, "y la que más pelea por su agua", ha añadido.
El líder de los socialistas castellanomanchegos ha garantizado un proyecto de estabilidad para el que ha pedido el mayor respaldo posible, puesto que "no solo necesitamos ganar por mayoría", sino que "cuanta más fuerza me acompañe, más cosas podremos conseguir", ha enfatizado.
"Milito en el partido de Castilla-La Mancha", ha apostillado, al tiempo que ha pedido a los asistentes "que se muevan, que no den por hecho ningún resultado" dado que "nos jugamos mucho" y "todo voto cuenta, no sobra ninguno", ha insistido frente a la "intoxicación enorme" que promueven sus adversarios.
En este punto, Emiliano García-Page ha reclamado el apoyo de quienes en ocasiones pasadas eligieron otras formaciones políticas, "incluso a los votantes habituales del Partido Popular", ha rematado, formación a la que ha reprochado "toda la campaña que han tenido, de insultos, de ofensas". "Se me caería la cara de vergüenza si mi partido, en vez de gastarse el dinero en programa y dar soluciones, se lo hubiera gastado en campañas de difamación, de calumnia", ha reflexionado.
Una campaña que, sin embargo, tal y como comenzaba diciendo en su intervención, para García-Page ha sido "con mucha diferencia, la mejor de mi vida", por lo que ha agradecido a todos cuantos la han hecho posible.
"Creo que somos lo que más conviene a esta tierra", ha recalcado minutos antes de la medianoche en un acto que ha compartido con el candidato a la reelección en la alcaldía conquense, Darío Dolz, y que ha contado con la presencia del secretario de organización del PSCM-PSOE, Sergio Gutiérrez; además de otros cargos orgánicos de la formación y del presidente de la Diputación Provincial de Cuenca, Álvaro Martínez Chana, entre otros.
PP: DETERMINACIÓN E IMPULSO
Por su parte el candidato del PP, Paco Núñez, ha cerrado la campaña en Talavera de la Reina (Toledo), donde ha pedido para este domingo el voto "en masa" para su partido, comprometiendo "determinación e impulso" político si llega a gobernar. Un acto en el que se ha referido a la cita electoral del domingo como algo histórico y vaticina una "clara y rotunda" victoria de su partido.
Y es que Núñez ha querido "ilusionar" hasta el último momento a los castellanomanchegos para que apuesten por el proyecto del PP, que tiene como único objetivo "convertir Castilla-La Mancha en una de las mejores regiones del país, porque no somos menos que nadie" -ha señalado recordando así una recurrente máxima de su rival político, García-Page.
Núñez se ha erigido como un presidente "sereno, con empuje, ambicioso", que ha estado "permanentemente" en la calle y que asegura allí seguirá con los ciudadanos.
Asimismo ha aprovechado este acto para dirigirse a los antiguos votantes del PP, a quienes ha pedido disculpas "con lo que pudimos hacer mal en el pasado", a los votantes que escogieron opciones nuevas pero se han sentido "defraudados" y a los votantes que eligieron la papeleta del socialista Emiliano García-Page: "Seré el presidente de todos y para todos. Cogeré el timón con dos millones de castellanomanchegos detrás", ha indicado.
CIUDADANOS: EL VOTO DE LA CLASE MEDIA
En Albacete, donde también opta a la alcaldía, ha cerrado la campaña la candidata a la Junta por Ciudadanos, Carmen Picazo, quien se ha mostrado "ilusionada" y ha pedido el voto de la clase media y de aquellos que quieren el cambio.
Para Picazo el domingo hay dos opciones "o votar lo de siempre y conformarnos, o votar el modelo liberal para que todo cambie".
"Debemos ser unos inconformistas para que se pueda revolucionar la sanidad y la educación, para que las clases medias dejen de estar exprimidas a tasas y a impuestos", por lo que el próximo domingo anima a todos a votar "para cambiar Castilla-La Mancha".
PODEMOS: VALENTÍA Y CONFIANZA
Por su parte Unidas Podemos ha elegido también Toledo para su cierre de campaña, donde ha celebrado un mitin en el que junto al candidato a la Junta, José Luis García, han participado representantes de las distintas formaciones que integran la coalición.
Un cierre de campaña en el que no ha faltado la música y en el que se ha incidido en que Unidas Podemos es la única opción que "garantiza una región progresista". "Tenemos las únicas medidas sociales, ecologistas y feministas, y la valentía que asegura llevarlas a cabo. Este domingo la confianza de la gente con sus votos va a hacerlo realidad", han subrayado.
VOX: NI CHANTAJES NI REGALOS
En Toledo, por su parte, ha cerrado la campaña el candidato de Vox, David Moreno, quien ha estado acompañado por el presidente nacional del partido, Santiago Abascal. Desde allí, en un mitin que ha llenado la plaza del Ayuntamiento, ha advertido al PP que su formación no acepta "ni regalos ni chantajes" a la hora de formar gobierno.
En este sentido, Abascal se ha mostrado molesto con el líder nacional de los populares, Alberto Núñez Feijóo, cuya propuesta al PSOE para que gobierne la lista más votada ha criticado y ha señalado que de no retirarla él se convertirá "en un peligro para la unidad de España".
Un contexto en el que ha insistido en marcar la diferencia entre Vox y el PP, puesto que "mientras que el PP quiere un cambio de 360 grados, para que todo siga igual, Vox quiere un cambio radical, de 180 grados".
Una intervención en la que Abascal no ha desaprovechado para recordar el asedio del Alcázar y reprocar al Gobierno central que con la aprobación de la Ley de Memoria Democrática pretenda "que los hijos se avergüencen ahora de sus padres, cuadno solo deben sentir orgullo".
Por su parte Moreno se ha mostrado convencido de que "el cambio real" lelgará a la región "con un gobierno de Vox" que saldrá de las urnas este domingo.
