TOLEDO.- Partido Socialista y Partido Popular avanzan en las negociaciones de cara a la elaboración de un nuevo Estatuto de Autonomía o la reforma del actual, entre cuyas premisas se encuentra la ampliación del número de diputados, vista la necesidad de ampliar la representatividad de los castellanomanchegos en una Cámara autonómica reducida a la mínima expresión tras la reforma realizada hace casi una década. Un contexto de negociación y voluntad de consenso que reconocen ambas partes, y aunque apelan a la discreción para llevarla a buen puerto, hay quien ha decidido filtrar la cifra de parlamentarios sobre la que se podría haber llegado a un preacuerdo: 59 diputados, lo cual también precisaría una 'mudanza', cuestión esta que también se ha aprovechado para poner sobre la mesa.
De esta forma se volvería al máximo previsto en la redacción originaria del Estatuto de Autonomía, que preveía un sistema proporcional puro, por la asignación directa de escaños, dentro de un arco de entre 47 a 59 diputados. Se modificaría así de nuevo, esta vez por consenso de la mayoría de la Cámara (el grupo parlamentario Vox no ha sido incluido en estas negociaciones), el punto segundo del artículo 10 del Estatuto, en el que tras la reforma llevada a cabo de forma unilateral en 2014 por el Ejecutivo presidido por la popular María Dolores de Cospedal, se redujo -"en aras de un mayor equilibrio entre la austeridad y la adecuada representatividad"- de manera significativa el número de parlamentarios, estableciéndose "un mínimo de 25 diputados y un máximo de 35".
Y aunque todo apunta a que la filtración sobre el número de diputados que se baraja habría salido desde el PP, su presidente regional, Paco Núñez, no solo niega la existencia de un acuerdo con el PSOE para reformar el Estatuto, sino que también advierte que no desvelará el contenido de las negociaciones que se lleven a cabo. Y es que, subraya, "no hay ningún acuerdo hasta que no esté todo acordado", dando así a entender que si bien esa cuestión sí podría estar ya pactada, todavía quedarían otras cuestiones por cerrar para el pretendido consenso.
En este sentido, Núñez ha admitido que "hay documentos de trabajo y mesas de negociación", aunque defiende que "todo lo que tenía que decir sobre el Estatuto" ya lo dijo antes de que dieran comienzo las negociaciones para sentar las bases de las mismas.
Asegura que por su parte, "ni de manera pública ni privada", va a salir ningún tipo de contenido de lo que se esté negociando "hasta que esté todo negociado".
Núñez ha insistido así en que la voluntad de su partido es "que haya un acuerdo, pero sobre el todo", por lo que no "enturbiarán" las negociaciones con declaraciones públicas sobre "algo tan serio" como es el Estatuto.
Mientras, desde el PSOE insisten en la "voluntad de acuerdo" y de buscar "grandes consensos" que mantiene el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, también para avanzar en la reforma del Estatuto de Autonomía con el Partido Popular, pese a que su líder regional, Paco Núñez, esté "en la contradicción".
Así lo señalaba el diputado del grupo socialista en las Cortes Fernando Mora, quien ha señalado la contradicción existente "entre lo que Núñez va diciendo por ahí y lo que está ocurriendo". Y es que, ha precisado, "si hay voluntad de acuerdo para hacer un Estatuto de Autonomía y esa voluntad de acuerdo es con el PP, es que nos estamos entendiendo con el PP y ellos reconocen ese entendimiento".
En este sentido, Mora ha señalado que "si se firma un plan de empleo y se hace con los presidentes de las diputaciones del PP que participan en ese plan de empleo, es que hay voluntad de entendimiento entre el PP y las instituciones que gobiernan y el Gobierno de Castilla-La Mancha".
Por ello, el parlamentario socialista se ha preguntado "qué le pasa a Núñez", llegando a la conclusión de que su "problema" es que "ni acaba de entender a la región ni acaba de entender a su partido ni a sus representantes institucionales", pues "está muy claro que a Page incluso le prefiere mucha gente del PP".
Para Mora "la filtración" sobre el estado de las negociaciones entre el PSOE y el PP para la redacción de un nuevo Estatuto de Autonomía para Castilla-La Mancha, pone en evidencia esa "contradicción" de Núñez, que por un lado "ataca a Page", mientras que por otro "nos estamos entendiendo con el PP y ellos reconocen ese entendimiento".
Pese a ello, considera que lo importante de esta reforma es que "haya voluntad de acuerdo" que tenga como conclusión "un nuevo Estatuto que debe ser apoyado por la inmensa mayoría", de ahí que sea necesaria "discreción" en esa vocación de llegar a consensos, algo en lo que "hay que evitar las filtraciones", ha señalado dirigiéndose al PP.
MUDANZA QUE SE DA POR HECHA
Y aprovechando los detalles sobre el contenido de las negociaciones, se ha vuelto a poner sobre la mesa la "necesaria" mudanza que tendría que realizar el Parlamento regional con este aumento significativo del número de diputados.
Un planteamiento que ya realizaba el jefe del Ejecutivo autonómico el pasado 4 de septiembre, durante su intervención en la constitución del Consejo regional de Transparencia y Buen Gobierno. Señalaba entonces García-Page que "seguramente" en esta legislatura tocaría tomar una decisión sobre "pensar en una nueva edificación del Parlamento autonómico", siempre en la ciudad de Toledo, "que pueda dar cabida a las dependencias y organismos independientes que están supeditados a las Cortes".
Un "paso adelante" que entonces lanzaba como propuesta, pero que apenas mes y medio después se presenta como una decisión firme y para la que se contempla que pudiera estar lista antes de que finalice esta legislatura, tal y como ha señalado en una entrevista con Europa Press el vicepresidente primero del Ejecutivo, José Luis Martínez Guijarro, quien confirma que ya se ha trasladado "formalmente" al presidente de la Cámara, Pablo Bellido, la "disposición" de la Junta a financiar una nueva ubicación.
Cuestión sobre la que se ha pronunciado este lunes el consejero de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital, Juan Alfonso Ruiz Molina, quien si bien ha precisado que aún no hay una estimación del gasto que supondría, sí ha confirmado que el Ejecutivo regional, a través de sus presupuestos, asumiría ese coste. "No tenemos una estimación. Lo que sí que hay es una necesidad, si se amplía el número de parlamentarios o incluso de grupos parlamentarios, de adecuar las instalaciones del legislativo a esa nueva situación", ha subrayado.
Tras confirmarse la disposición del Gobierno a sufragar el cambio de sede, ahora la iniciativa debe ser del presidente de las Cortes y la decisión de afrontar el traslado (previa búsqueda de nueva ubicación, ya sea en un edificio existente o de un solar para una nueva construcción) adoptada por la Mesa.
VOX SE OPONE
Por otra parte, mientras unos y otros piden discreción, defienden la voluntad de acuerdo y al tiempo van dejando ver por dónde irá el acuerdo, el tercer partido con representación parlamentaria en esta legislatura, Vox, al que se ha excluido de estas negociaciones, también opina al respecto.
Así han mostrado su "disconformidad total" tanto con el aumento del número de diputados en las Cortes regionales, al considerar que sería "un gasto innecesario" para los ciudadanos de Castilla-La Mancha, como al cambio de sede en un nuevo edificio, lo cual tilda de "gasto absurdo".
Lo ha señalado así el presidente del grupo parlamentario, David Moreno, quien considera que las negociaciones entre el PSOE de Page y el PP de Núñez a este respecto son "un insulto" a todos los castellanomanchegos. Y es que, en su opinión, "los ciudadanos no necesitan ni más políticos ni más gasto en políticos", por lo que cree que ese dinero debería gastarse en sanidad, para reducir las listas de espera; en mejorar la educación o en los sectores productivos.
Para Moreno los 33 diputados con los que cuenta actualmente el Parlamento autonómico "hay una representación más que suficiente para los ciudadanos", por lo que ve "inaceptable" el aumento que se plantea.
