Page ve "comprensible" que haya quien piense que se tomaron decisiones "cambiando pautas"

  • El presidente del Ejecutivo castellanomanchego confía en que en las sucesivas decisiones sobre territorios que avanzan de fase haya "más puntería" y todo "esté más claro".
  • García-Page asegura que "en muy poco tiempo" toda Castilla-La Mancha podrá estar en fase 1.

TOLEDO.- El presidente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha opinado que "es comprensible que haya quien piense que se han tomado decisiones en el último momento y cambiando pautas", pero ha añadido que "también es comprensible que las pautas evolucionan".

García-Page ha sido preguntado, en una entrevista en TVE, por las críticas que han realizado otros presidentes de comunidad autónoma, como por ejemplo el valenciano Ximo Puig, sobre el hecho de que algunas comarcas de la Comunitat Valenciana hayan pasado a la fase 1 y otras no, toda vez que en Castilla-La Mancha dos provincias han entrado este lunes en esta fase -Cuenca y Guadalajara- y las tres provincias restantes, no.

El presidente castellanomanchego, que ha afirmado que desconoce los datos y la bilateralidad con que ha hablado la Comunitat Valenciana con el Gobierno central, ha considerado que "es comprensible que haya quien piense que se han tomado decisiones en el último momento y cambiando pautas".

Pero ha añadido que también es comprensible que las pautas evolucionan, a medida que avancen los días, por lo que ha opinado que es posible que dentro de un mes, cuando se pueda cambiar de región, "las pautas puedan ser distintas".

En cualquier caso, ha defendido que "se trata de soltar la cuerda sin perder de vista la trayectoria del virus" y ha opinado que para el Gobierno central debe ser "ingrato" decidir qué zonas cambian de fase y cuáles no, por lo que ha confiado en que "en segundas ediciones" a la hora de tomar este tipo de decisiones "habrá más puntería, será todo más claro", ya que a su entender, "la primera vez ha sido más compleja".

En cuanto a la situación de Castilla-La Mancha, García-Page se ha mostrado confiado en que "en muy poco tiempo" toda la región pueda estar en fase 1 y ha defendido que "son interpretaciones comprensibles".

Así, ha señalado que "cuando se habla de precipitación en las decisiones o cambio de interpretación", se debe poner "todo en interpretación relativa", porque se está "haciendo camino al andar" y "no hay antecedentes" de una situación similar.

En el caso de Castilla-La Mancha ha subrayado que "no hay problema de recursos asistenciales" y que, este lunes por primera vez desde que se decretó la situación de pandemia, hay menos de cien personas ingresadas en UCI de la región, en concreto 99, cuando un día normal sin COVID-19 puede haber unos 140 pacientes en las unidades de críticos, y hay unas 500 personas en hospitalización, mientras que en los momentos más duros hubo más de 3.000 ingresadas por coronavirus.

"La evolución es muy buena en el conjunto de la región", ha valorado García-Page, que ha añadido que a los datos que ha aportado el Gobierno regional el Ministerio de Sanidad ha incorporado "unos análisis, unas interpretaciones que en este caso son algo más conservadoras", pero ha defendido la importancia de combinar la prudencia con "el tanteo de la posibilidad de contagio, atreverse a salir, de manera contenida".

De este modo, ha apostado por medidas para ir recuperando la normalidad, siempre con cautela, pues ha apuntado que es posible que en otoño haya un rebrote, también el otoño de 2021, aunque ya haya vacuna, lo que supone que se pueda estar "constantemente expuestos al virus" y por ello, se "intente convivir con el virus" desde la experiencia adquirida.

Por ello, ha defendido la importancia de crear un circuito que pueda detectar con rapidez los nuevos casos, aislarlos y "avanzar lo más deprisa por el resto de carriles".

En cuanto a la polémica surgida en torno a si el Gobierno central debe dar a conocer los nombres de los expertos que deciden qué territorios pasan de fase en la desescalada, ha considerado que está identificado "quién toma la decisión definitiva" que es el ministro de Sanidad, Salvador Illa, y el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio, Fernando Simón.

Por lo tanto, ha considerado que el debate no le parece "sustancial" y ha añadido que si se conociera quiénes son el resto, "habría que confinar a los expertos para que no estuvieran sometidos a ningún tipo de presión".

García-Page también ha opinado sobre el reparto de fondos europeos para superar la crisis del coronavirus y ha defendido que una primera parte de los mismos deban destinarse con criterios preferentes a las comunidades que han tenido más gastos por la pandemia, en cuestiones como contratación de personal sanitario y material.

Y ha considerado que un segundo bloque de fondos pueda repartirse con criterios de qué comunidad autónoma ha perdido mayor actividad económica por la pandemia, como sería el caso de Canarias o Baleares por la caída del turismo.

Comentarios