MADRID.- El jefe del Ejecutivo de Castilla-La Mancha y secretario general del PSOE en la región, Emiliano García-Page, ha manifestado hoy su "empatía" y "apoyo" al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para combatir y contestar la campaña de "calumnias" de la derecha, la cual "no se puede consentir".
Así lo ha señalado durante su intervención en el Comité Federal del PSOE, celebrado en la madrileña sede de Ferraz, reconvertido en un acto de apoyo a Sánchez, tras la decisión de cancelar su agenda pública hasta el lunes para reflexionar sobre su continuidad al frente del Ejecutivo tras la denuncia planteada por la organización Manos Limpias contra su mujer, Begoña Gómez.
Mientras que centenares de personas se concentraban en la calle para mostrar su apoyo al presidente del Gobierno y pedirle que se quede, en la sede socialista cerraban filas entorno al secretario general, incluido García-Page, uno de los más críticos con algunas decisiones de Sánchez.
Page ha querido transmitir "al compañero presidente del Gobierno" toda su empatía y la de "miles y miles de personas que no solo sabemos que va en serio su dolor, sino que hemos pasado por experiencias muy parecidas".
Punto en el que ha recordado cómo en Castilla-La Mancha, durante los cuatro años de gobierno de Cospedal, "la socia de Villarejo", "salíamos a una querella por semana". Un periodo en el que -ha señalado- también se hizo la pregunta que hoy se hace el presidente del Gobierno.
Sin embargo, "a esa pregunta siempre he reaccionado con la determinación de no dejar una sola calumnia, una sola insidia, una sola mentira sin contestar".
Y es que, ha insistido, "hay que contestarlas". Algo para lo que "vais a contar con la dirección y, por supuesto, Pedro, con nuestro apoyo, con el mío particular, porque no se puede consentir", ha recalcado.
Palabras que pronunciaba tras mostrarse convencido de que Sánchez "va en serio" con su decisión de parar y reflexionar sobre su futuro, por lo que ha alabado que haya sido capaz de hacer pública esa "manifestación personal de dolor", que tanto ha molestado a los "radicales".
García-Page ha valorado que en su carta a la ciudadanía el secretario general del PSOE, el presidente del Gobierno, "se duela". "Prefiero, sinceramente, que nuestros compañeros y nuestros dirigentes se duelan ante una acusación injusta, falsa, a que no, a que muestren indiferencia o saquen pecho", ha apostillado.
Es esa, precisamente, la actitud que más le mueve a "compartir con miles de compañeros de nuestra historia y los de hoy, un objetivo común".
Y es que el PSOE, ha dicho, es un partido que "mira por las personas", en cuyo seno se pueden cometer errores, pero en el que el objetivo fundamental de quienes han dado el paso de militar en el partido "son las personas". Un partido, ha señalado también, que "cree en la honestidad, que no lo tiene como un aditamento de la política".
Por ello, el secretario general de los socialistas castellanomanchegos considera que hay que decirle a la gente que "en este país no se puede ser mejor político a costa de ser peor persona", que es, a su juicio, lo que pasa hoy en muchos casos en España: "No se puede ser mala persona creyendo que así se hace mejor política", ha sentenciado.
Así, y puesto que se ha llegado a esta situación por el "dolor" al que ha llevado toda esta campaña "no por una querella falsa, porque eso no puede tumbar a un presidente del Gobierno", ha argumentado, es necesario dejar claro a la gente que "a este partido no le van a quitar la moral, y menos los que no tienen ninguna".
