TOLEDO.- El Monumento Natural de las Barrancas no reúne las condiciones mínimas de seguridad exigibles para ser visitadas por miles de personas cada fin de semana. Una denuncia que hace el colectivo Ecologistas en Acción, desde el que alertan de los "graves riesgos" para la seguridad de las personas y para el medio ambiente.
Situaciones de peligro que se habrían agravado a raíz de las intervenciones llevadas a cabo "de forma imprudente" tanto por la Dirección Provincial de Agricultura de Toledo, como por el propio Ayuntamiento de Burujón, según denuncia Ecologistas en un comunido.
Actuaciones que consideran más graves en el caso de la primera, al ser ésta quien debiera velar por la protección del espacio y el uso ordenado del mismo. Sin embargo, lamentan, "es quien está poniendo en peligro la seguridad de las personas y la protección de las especies que lo habitan".
En este sentido, detallan cómo en una reciente remoción de la cartelería y las zonas de uso público, la Dirección Provincial de Agricultura también abría un nuevo sendero que "saca" a los visitantes de la ruta acondicionada para visitar el Monumento. Una nueva vía alternativa a la senda ecológica que dirige a los visitantes a una zona "muy peligrosa" al discurrir por el borde de los cortados, con desniveles que superan en muchos puntos los 50 metros, que "no dispone ni de protecciones ni de balizas", denuncian desde el colectivo ecologista, y que presenta numerosas grietas, por lo que el riesgo de derrumbes "es altísimo".
A todo ello se suma el hecho de que el sendero "en realidad no es tal", puesto que se trata de un camino angosto provocado por el paso de cazadores, así como "algún visitante osado" sobre terrenos de particulares y del Ayuntamiento, por lo que "no reúne los requisitos más elementales ni siquiera para ser sendero homologado".
Pero además de los riesgos que ya de por sí presenta esta nueva vía, el paso de personas por ella está ocasionando "erosión y daños en el paisaje", así como en los hábitats del Monumento Natural, al discurrir por zonas abruptas y de cría de especies protegidas.
De hecho, apuntan desde Ecologistas en Acción de Toledo, esta zona quedó hace años fuera del diseño de las rutas por el Monumento debido su "gran sensibilidad ambiental".
BARANDILLAS PARA NO APOYARSE
Pero los riesgos que hoy por hoy presenta este visitado y admirado Monumento Natural, conocido como el Cañón del Colorado español, no se encuentran únicamente en las últimas intervenciones llevadas a cabo en la zona, sino también en algo que viene de lejos.
Se trata en este caso de las barandillas que bordean la senda ecológica. Elementos que parecen no reunir las condiciones para tal fin y en los que ahora, tras el fatal accidente vivido el pasado marzo en uno de los caminos que dirige al mirador del nacimiento del río Mundo al vencerse una barandilla, se han colocado unos carteles avisando de que no son aptas para apoyarse.
Sin embargo, explican desde Ecologistas, estas barandillas inadecuadas llevan años instaladas y ahora, a pesar de los carteles, "siguen siendo peligrosas y debieran sustituirse por otras que sean seguras".
Situaciones todas ellas que llevan al colectivo a no salir de su asombro ante las "desatenciones y mala gestión" que recibe el Monumento Natural de las Barrancas, el espacio más emblemático de la provincia de Toledo y el que más visitantes recibe, especialmente en los últimos años tras haber sido escenario de numerosas filmaciones de todo tipo.
FALTA DE VIGILANCIA
Además de los problemas de seguridad para los visitantes y de protección de la naturaleza, Ecologistas en Acción de Toledo denuncia también la realización de obras "ilegales", la presencia masiva de vehículos en días de gran afluencia de personas, y a su vez la "clamorosa" falta de vigilancia y control de las que son causantes el Ayuntamiento y la Dirección Provincial de Agricultura.
Por ello desde el colectivo reclaman al consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural que, de cara a la eventual masiva llegada de visitantes para el puente de mayo, "se clausure de nuevo el sendero, se retire la cartelería que lo indica, se ponga vigilancia y se ordenen las visitas, así como el aparcamiento de vehículos.
Y es que, advierten, de ocurrir algo que nadie desea, "la asociación hará responsables a las administraciones" por no actuar con la "prudencia" y "diligencia" exigibles en un caso "tan grave" como éste, en el que se pone en riesgo la seguridad de las personas que acuden al Monumento Natural y el propio espacio protegido.
