Canibalismo en las granjas de porcino a causa de la escasez de pienso, los ganaderos dan la voz de alarma

Desesperación en algunas explotaciones de la provincia de Toledo por el goteo de muertes que se están produciendo a causa de la falta de alimento.
En algunas explotaciones se están perdiendo entre 4 y 7 animales al día. - ASAJA TOLEDO
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TOLEDO.- Ganaderos de porcino de la provincia de Toledo han manifestado su "preocupación" y "desesperación" ante el goteo de muertes que se está produciendo en sus granjas debido a la falta de pienso. Y es que aseguran que el estrés por la escasez de alimento "se traduce en actitudes agresivas por parte de los animales", dirigidas especialmente contra los más débiles, ocasionando peleas y ataques que derivan en muertes en algunos casos y en otros con animales heridos. En algunas explotaciones se estarían produciendo entre cuatro y siete muertes al día.

Así lo advierten desde Asaja Toledo, en un comunicado en el que apuntan que la muerte se produce principalmente debido a la ansiedad a la que se ven sometidos los cerdos, habiéndose llegado a producir algunos casos de canibalismo. Una situación que está llevando a la desesperación a los ganaderos, ante la imposibilidad de aislar a todos los animales.

Según explican desde la organización agraria, una de las ganaderas afectadas ha relatado cómo aparte de tener las zonas de enfermería llenas, ha tenido que habilitar varios corrales para intentar proteger a los más débiles, aunque "es imposible separarlos a todos".

En el caso de esta ganadera, habría intentado tranquilizar a sus animales echándoles hierba y productos que, aunque no les sacian ni suplen las carencias alimenticias y nutricionales, les ayudan a bajar los niveles de estrés.

Aseguran que "la situación es crítica", ya que la huelga del transporte iniciada el 14 de marzo "ha dejado sin materias primas a los almacenes y a las fábricas de alimentación animal", a lo que se ha sumado la actuación de los piquetes dificultando la salida de cereales de los puertos.

Recuerdan desde Asaja Toledo que a lo largo de la semana han salido varios convoyes de camiones fletados por ganaderos, cooperativas y fábricas de pienso de la provincia, y custodiados por la Guardia Civil, con destino al puerto de Cartagena, pero -advierten- el abastecimiento es insuficiente para alimentar a toda la cabaña ganadera de la provincia.

El tercero los coordinados por el Gobierno regional precisamente ha regresado en las últimas horas del puerto murciano, hasta donde se habían desplazado escoltados por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado un total de 115 camiones procedentes de distintas provincias de la comunidad autónoma.

No obstante, desde la organización agraria aseguran que las fábricas y cooperativas de pienso se encuentran "prácticamente vacías", por lo que los pocos camiones que han llegado esta semana a la provincia, con una capacidad media de unos 25.000 kilos por vehículo, "apenas han mitigado las necesidades del sector ganadero".

En este sentido, explican que una granja media de porcino de cebo, de unos mil animales, precisa alrededor de 400 kilos de pienso al día, mientras que en el caso del vacuno la cantidad sube a más de 10.000 kilos para una explotación de un millar de cabezas.

Por otra parte, el temor a sufrir daños en los vehículos por parte de los piquetes -a los que esta semana desde el Gobierno regional se pedía "empatía" con los ganaderos- está dificultando encontrar camioneros dispuestos a ir en los convoyes de los ganaderos.

Desde Asaja Toledo reconocen la legitimidad de la protesta de los transportistas, un sector que, como el agrario, "no puede seguir trabajando a pérdidas por la subida del combustible, que está gravado con un 50 por ciento de impuestos". No obstante, insisten, en el caso de los animales se trata de "una situación de emergencia a la que no se está dando solución".

Por último desde la organización agraria denuncia la "inacción" por parte del Ministerio del Interior, al que exige que "actúe" para asegurar unos servicios mínimos que garanticen la cobertura de las necesidades de alimentación de la cabaña ganadera y evitar así que los animales mueran de hambre.

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