TOLEDO.- Septiembre es el mes elegido para que vea la luz una nueva convocatoria del Plan de Empleo que promueve la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, que en esta ocasión va a dotarla de un presupuesto superior a los cincuenta millones de euros, con los que se prevé podrán beneficiarse unas 8.000 personas desempleadas de la región.
Así lo ha adelantado este jueves en rueda de prensa la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, quien ha explicado que el Gobierno regional tiene programado que la orden de bases de la nueva edición se haga pública antes de finales de este mes o a principios de agosto, aunque la convocatoria se lanzará en septiembre.
Además, como novedad, Franco ha asegurado que la Junta castellano‑manchega cuenta con el compromiso de las cinco diputaciones provinciales, que ya han manifestado su intención de sumarse a esta iniciativa, lo cual ha calificado de "muy buena noticia" porque, según la consejera, permitirá que el plan tenga "carácter homogéneo" en las cinco provincias de la región, ya que todos los ayuntamiento podrán participar "en las mismas condiciones".
Además, ha reconocido y agradecido el esfuerzo de las cinco instituciones provinciales por seguir sumando recursos para atajar el desempleo, al tiempo que ha destacado la necesidad de seguir trabajando en políticas de estímulo del empleo.
Una postura favorable que pone fin al veto que durante la legislatura pasada puso la Diputación de Cuenca, entonces gobernada por el Partido Popular, a las convocatorias extraordinarias de empleo que eran impulsadas por el Ejecutivo de Emiliano García-Page. Se revierte de esta manera la polémica autoexclusión que protagonizó la institución provincial en los últimos años, en los que los conquenses en paro no pudieron aprovecharse de los puestos de trabajo ofertados por la Junta.
Respecto a la estrategia de empleo de la Junta , Franco ha incidido en que la acción del Gobierno que preside García-Page tendrá "tres ejes", de los que dos estarán dirigidos a las franjas de edad de "mayor vulnerabilidad", es decir, jóvenes y mayores de 50 años, mientras que el tercero se centrará en que en la región exista un empleo "en igualdad".
Franco también se ha referido a la línea 'cheque transición', que persigue facilitar la transición de los beneficiarios del plan de empleo al mercado laboral privado a través de ayudas económicas a la contratación, y ha precisado que hasta el momento se han recibido 236 solicitudes, de las que 140 ya han sido valoradas positivamente.
