TOLEDO.- El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, considera una "parodia" de la vida política que se haya planteado la figura de un verificador internacional para mediar en las negociaciones entre el PSOE y Junts tras el acuerdo de investidura. Algo que no termina de entender, ha señalado, aunque deja claro que "lo que pueda decir, opinar, sugerir o proponer" no representa ni vincula a la región que preside ni al resto de administraciones e instituciones del Estado.
Manifestaciones que García-Page ha realizado en Toledo, durante la celebración en el Parlamento autonómico del acto instucional con motivo del 45 aniversario de la Constitución española, al referirse al "problema de incertidumbre" que se plantea y el "riesgo" que lleva a este tipo de parodias, como la designación del diplomático salvadoreño Francisco Galindo como 'coordinador del mecanismo internacional' en las conversaciones entre ambos partidos políticos.
Y es que aunque reconoce la "libertad de reunión" que tienen los partidos políticos y "con todo el respeto" al diplomático elegido, el jefe del Ejecutivo castellanomanchego considera que tanto él como presidente, como la institución a la que representa y el resto de administraciones e instituciones del estado, deben dejar claro "de manera unívoca" que "no nos vincula, no nos sentimos representados y dependientes de lo que un embajador pueda decir".
En este sentido, Page ha apuntado que en la actual sociedad comunicacional pudiera parecer que "lo que diga cualquiera fija, marca o vincula nuestro marco de convivencia", algo que -ha incidido- no es así.
"Cada uno que parodie la vida política como quiera", ha señalado el barón socialista, quien no se siente "ni vinculado ni representado" por esta figura y "bajo ningún concepto entiendo que aspectos que vinculan a los ciudadanos de mi tierra estén sometidos a la consideración de nadie que no sea la propia Constitución".
De este modo, Emiliano García-Page se ha mostrado firme y ha advertido que "si alguien está pensando en decidir sobre los derechos de los demás", debe saber que las Cortes de Castilla-La Mancha ya han autorizado el ejercicio "de todas las acciones constitucionales necesarias y oportunas" para impedir que se vulneren los derechos de los ciudadanos de la región ante "eventuales referéndums", "aunque ninguno vale", ha apostillado. Un respaldo al ejercicio de acciones en este sentido que la Cámara autonómica daba al presidente regional hace un año, en diciembre de 2022, cuando se aprobaba con los votos a favor del PSOE y en contra de PP y Ciudadanos, la resolución planteada por los socialistas para dar respaldo a las actuaciones necesarias para "defender a la región en sus intereses legítimos, una visión de una España unida y de estricta igualdad en derechos y obligaciones entre españoles y territorios frente a los privilegios defendidos por partidos independentistas" en caso de una hipotética convocatoria de referéndum.
BASADA EN UN RELATO "FALSO"
Para García-Page no cabe "ni mediador ni otros debates" en esta cuestión, puesto que "el relato en el que se basa la parodia, esta representación, es falso". De ahí, ha insistido, que no pueda salir de ello solución a ningún problema -"llamarlo conflicto no deja de ser una bobada", ha precisado-.
Y es que, según el presidente castellanomanchego, "a ningún problema, como a ninguna enfermedad" no se le puede dar solución "si no hay verdad por delante y diagnóstico cierto".
En esta línea se ha congratulado de que en Castilla-La Mancha se tengan "las cosas claras", se sea consciente de que España hoy "es uno de los espacios envidiados en el planeta" y en cuyo marco Castilla-La Mancha ha demostrado que "cuando nos dejan la sanidad, la educación, la cohesión, la igualdad o las infraestructuras, van mejor".
García-Page ha defendido así esta realidad que se ha legitimado "porque funciona", como el resto de autonomías, ante lo que ha planteado que si las diecisiete "presumimos de hacer las cosas bien", "cómo puede haber debate" al respecto. "Si las diecisiete funcionan bien, la suma funciona estupendamente", ha sentenciado.
Por último, el presidente de Castilla-La Mancha ha recalcado la importancia de "celebrar la Constitución" y en ese contexto "decir lo que queremos decir", en lugar de que "esté bien visto que hablen algunos y los demás tengamos que asentir".
García-Page ha recordado que España "decidió tener una orquesta", y aunque asegura que no aspira "a ser director de ninguna", sí está dispuesto a hacer que "la voz de Castilla-La Mancha, en la libertad que nos da la Constitución, se haga escuchar, nítida y clara".
