TOLEDO.- La negociación de la reforma del Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha está en marcha, aunque todavía de manera "informal", y sobre la mesa se encuentran cuestiones ya señaladas en la agenda, como el blindaje de los servicios públicos, reformular el texto para que el Gobierno pueda emitir decretos para poder legislar de manera inmediata en situaciones excepcionales o la ampliación del número de diputados. A ellas se van sumando otros puntos a la lista, algunos de carácter más reglamentario, como establecer sesiones de control al Ejecutivo en sede parlamentaria.
Una cuestión que plantea el Partido Popular, desde el que consideran que se debería reformar el reglamento de las Cortes puesto que "somos el único parlamento que no tiene sesión de control al Gobierno".
Así lo ha señalado el presidente del PP de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, durante una entrevista en Castilla-La Mancha Media, en la que ha señalado que es "fundamental" que el Parlamento aborde este asunto con normalidad, donde la oposición pueda fiscalizar al Gobierno mediante preguntas, para que los ciudadanos puedan conocer los temas de actualidad".
Núñez, que por primera vez ha reconocido abiertamente la existencia de estos primeros contactos informales para dialogar sobre cómo se puede afrontar la reforma estatutaria, ha señalado que esa cuestión debe abordarse "desde la discreción" y ha señalado que hace falta "prudencia y paciencia", puesto que se trata de la ley más importante de la región.
En este sentido, el presidente regional del PP se ha mostrado a favor de reforma el Estatuto porque si bien "nos ha sido útil estos años", se debe "dar un nuevo marco legal para posibilitar el crecimiento" para el futuro de la región.
Desde el PP se marcan unas posiciones "básicas" de cara a esta reforma, como por ejemplo "reformular algunas cuestiones" como el hecho de que el Gobierno "pueda hacer decretos para poder legislar de manera inmediata sobre un problema determinado, por ejemplo como ocurre hoy con la DANA".
Asimismo también consideran que se debe hablar de "cómo blindaremos la sanidad, la educación pública" o cómo se garantizará el agua para el agricultor y ganadero, las infraestructuras y servicios sociales, "porque el estatuto es todo eso".
Cuestiones en las que coincide con el Ejecutivo del Partido Socialista, desde el que en diversas ocasiones se ha señalado tanto el blindaje de los servicios públicos como en la necesidad de ampliar la capacidad del Gobierno para emitir decretos y poder legislar de una manera más ágil en situaciones de emergencia, entre los asuntos a abordar en la reforma.
Como también coinciden en plantear, ahora sí, la necesidad de un aumento del número diputados, "siguiendo la proporcionalidad y un reparto equitativo y justo, que pueda ser representativo para todo el territorio".
Un planteamiento con el que el PP ahora rechaza el realizado en 2014 durante el mandato de la que también era su dirigente regional, María Dolores de Cospedal, quien tras haber planteado tan solo dos años antes una ampliación del número de diputados -pasando de 49 a 53-, volvió a reformar la ley electoral en solitario reduciendo los parlamentarios autonómicos a 33. Una situación que condenaba a Castilla-La Mancha, con más de 2 millones de habitantes, al último puesto en cuanto a representatividad de la ciudadanía, únicamente igualada por La Rioja, donde sus 320.000 habitantes también tienen 33 diputados que les representen. Una situación que casi una década después, sigue sin ser resuelta.
"Lo dialogaremos y negociaremos porque está dentro de un todo", ha sentenciado Núñez.
DE MOMENTO, SIN CONTACTOS CON VOX
Contactos y reuniones con el PP que ha confirmado el secretario de Organización del PSOE de Castilla-La Mancha, Sergio Gutiérrez, quien ha precisado también que por el momento no tienen previsto ampliar dichos contactos a Vox, tercera formación con representación parlamentaria.
Preguntado por las palabras de Núñez, reconociendo finalmente la existencia de los contactos, Gutiérrez ha incidido en que la intención del PSOE es que la región tenga un nuevo estatuto "cuanto antes" y que cuente "con el mayor consenso posible".
Pero además, desde el PSOE coinciden con Paco Núñez en la necesidad de que para que estos contactos sean productivos y puedan llegar a buen puerto, la discreción "es la mejor herramienta posible".
Y si con el principal partido de la oposición los contactos ya están en marcha, no es así con el tercer partido con representación en el arco parlamentario en esta legislatura. Desde el PSOE no se ha mantenido ningún contacto con Vox por este asunto, ha precisado Gutiérrez, puesto que la finalidad es "explorar las posibilidades de acuerdo" con el PP, "con el que tiene la mayor representatividad" en la oposición.
Después, ha precisado, "se irán ampliando los contactos", pero ya en el trámite parlamentario, cuando los grupos políticos puedan hacer enmiendas y aportaciones.
Y es que, cabe recordar, esta reforma del Estatuto de Autonomía es una de las "prioridades" del Ejecutivo que preside Emiliano García-Page de cara a esta legislatura, tal y como anunciaba el pasado 31 de mayo, durante el acto institucional del Día de la Región, celebrado en Manzanares (Ciudad Real).
Por su parte desde Vox, el presidente de su grupo parlamentario en las Cortes, David Moreno, advertía este martes en una entrevista en CMMedia que no apoyarán una modificación del Estatuto de Autonomía en la que la única propuesta sea aumentar el número de diputados y el gasto.
Aunque Moreno aseguraba que esperará a que los socialistas les informen sobre su idea de reforma, criticaba que el PSOE "vende" como necesaria la modificación, pero sigue sin explicar ni a la ciudadanía ni a Vox en qué consiste el cambio que plantea.
