TOLEDO.- Menos alumnos por aula y disminuir el número de horas lectivas para los docentes. Estas son las asignaturas pendientes de la educación castellano-manchega que han denunciado públicamente el Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza (STE) y la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), el mismo día ‑hoy, lunes‑ que se ha dado el pistoletazo de salida al curso escolar 2019‑2020 en la región con la incorporación de los profesores a los centros, un proceso que culminará el próximo 9 de septiembre con el comienzo de las clases.
Un inicio que ambos colectivos han criticado por saltarse la normativa vigente en materia de enseñanza pública. Y es que, según han denunciado, la nueva consejera de Educación, Rosa Ana Rodríguez, ha empezado su mandato "asumiendo la ilegalidad heredada", ya que ha firmado una modificación de las ratios en la que todavía en 4º, 5º y 6º de Primaria se supera lo estipulado por ley, con 28 alumnos en vez de 25. Estudiantes por aula que en Bachillerato no deberían superar los 32, pero que en 2019 dicha ratio se mantiene en una "vergonzosa cifra" de 40 alumnos.
Así lo han puesto de manifiesto los portavoces de STE en la región, Sara Merino y Pedro Ortega, quienes han avanzado este lunes que iniciarán movilizaciones conjuntas con el resto de organizaciones del ámbito educativo para pedir el fin de los recortes que llevó a cabo el Partido Popular y exigir a la Administración autonómica que acabe con las aulas "masificadas" y cumpla la ley para garantizar unas ratios "dignas".
Reivindicación a la que han sumado otras peticiones como el cambio del sistema de adjudicación de sustituciones, para que sea más ágil y evite que el alumnado esté varios días sin recibir clases por el profesor interino sustituto, así como la disminución del horario lectivo del profesorado hasta fijar el horario máximo del profesorado en 23 horas en Infantil y Primaria y 18 horas en el resto de enseñanzas, pues denuncian que actualmente en Castilla-La Mancha el horario es más extenso que en las comunidades limítrofes.
Unas reclamaciones compartidas con CSIF, que también este lunes a través de una nota de prensa ha destacado la necesidad de afrontar "de forma contundente, seria y responsable" las mejoras estructurales en la educación pública de la región.
EDUCACIÓN AVANZA MEJORAS
Comienzo de curso caldeado por esta amenaza de movilizaciones que el Gobierno regional ha querido abordar anunciando que ya de cara al próximo curso pretende llevar a cabo una modificación de las ratios de Primaria, que pretende fijar en 25 alumnos por clase.
La consejera de Educación ha respondido de esta manera a las preguntas de los periodistas en relación a las demandas de los sindicatos y ha recordado que en este curso se han "acomodado las ratios de Secundaria", pues se han fijado en 25 alumnos por aula.
De esta forma, Ana Rodríguez ha apuntado que se están "recuperando esos umbrales que se tenían a muchos niveles antes de 2011", en referencia a ratios por clase y a "otras cuestiones de carácter pedagógico y organizativo que sufrieron mucho en el Gobierno de María Dolores de Cospedal".
El proceso, no obstante, será "gradual y paulatino", ha dicho la consejera. Para ello, ha anunciado que se llegará a un acuerdo con los sindicatos "para acomodar definitivamente las ratios a los estándares que se consideran que pedagógicamente son más adecuados".
