El impacto de la guerra y las sanciones en las exportaciones de Castilla-La Mancha se prevé "bastante negativo"

El IPEX analiza los problemas a los que se enfrenta la economía de la comunidad autónoma tras la intervención militar de Rusia en Ucrania. Los sectores agroalimentario y textil, los que se verían más afectados.
Imagen de una asociación de ucranianos en España tras desatarse el conflicto bélico. — EFE
photo_camera Imagen de una asociación de ucranianos en España tras desatarse el conflicto bélico. — EFE

TOLEDO.- La intervención militar de Rusia en Ucrania causará efectos adversos en la economía de Castilla-La Mancha, que vería limitadas sus exportaciones a los dos países de Europa del Este ante la aprobación de sanciones contra el Gobierno de Vladímir Putin y la respuesta del Kremlin, así como un posible enquistamiento del conflicto.

Así lo ha asegurado el director del Instituto de Promoción Exterior de Castilla-La Mancha (IPEX), Luis Noé, quien ha afirmado que la guerra tendrá un "impacto bastante negativo" en las exportaciones de la comunidad autónoma, aunque ha señalado que el envío de productos a Rusia y Ucrania tiene un peso "moderado".

La Federación Rusa se sitúa en el puesto número 18 del ránking de destinos de las ventas de Castilla-La Mancha con valor de 68 millones de euros en 2021, mientras que el país presidido por Volodímir Zelenski cae hasta el número 38, donde las ventas rondaron los 22 millones de euros el año pasado.

El principal sector exportador de Castilla-La Mancha a Rusia es el textil, por lo que es previsible que sea el área comercial que más se resienta, seguido de los productos agroalimentarios (vino, conservas o carne), el calzado y los sectores industriales.

En el caso de Ucrania, las exportaciones están "mucho más diversificadas", aunque las principales ventas son, al igual que en Rusia, el vino, el textil, los productos agroalimentarios y el sector industrial.

A nivel comercial, el conflicto bélico puede generar impactos indirectos como el incremento de los costes energéticos, "que va a ocurrir de manera muy clara", y un riesgo en el descenso de la confianza de los consumidores.

También va a perjudicar a la actividad comercial las nuevas sanciones que van a imponer la Unión Europea y los Estados Unidos a Rusia, así como la respuesta de Putin, que va a provocar que el comercio esté "totalmente trastocado" en un contexto "sin normalidad".

"Una guerra jamás es una buena noticia", ha aseverado el director del IPEX, que ha recordado que el comercio a nivel global arrastra una situación "muy complicada" por la pandemia del coronavirus y que la comunidad autónoma aún no ha recuperado el volumen de ventas que registraba antes de la pandemia, cuando registraba un rango de 90 millones de euros en Rusia y que, en 2020, se redujo notablemente hasta los 70 millones.

Por su parte, las ventas a Ucrania presentaban cifras positivas e, incluso, se produjo un crecimiento de exportaciones el año pasado, aunque ahora "habrá que ver qué evolución tiene porque el comercio se detiene", ha lamentado Noé, que ha informado que la Junta tenía previsto para el mes de mayo una acción de promoción para el sector de bienes de consumo en Rusia que se ha visto obligada a cancelar.

El intercambio de bienes a otros países también se va a ver afectado pese a la "buena dinámica" que se observaba a nivel comunitario por esta situación "imprevisible de riesgo e incertidumbre" ante el temor de que el conflicto se enquiste y que el proceso sea largo, tal y como es previsible que ocurra.

"Estamos en los inicios de la situación bélica y no sabemos cómo va a evolucionar, pero no sería raro que se prolongara durante meses y, si es así, pues el impacto puede ser negativo de forma general en el ánimo, en la confianza y en el comportamiento del consumo", ha sentenciado.

DIEZ MILLONES EN VINO Y A LA ESPERA DEL CEREAL

Por su parte, el consejero regional de Agricultura, Francisco Martínez Arroyo, ha reiterado que las ventas de vino a Rusia no son significativas, situándose en los diez millones de euros de media en los últimos años. Una cantidad "modesta", sobre todo teniendo en cuenta que la facturación global del vino de Castilla-La Mancha se situó en el año 2021 en los 700 millones de euros.

En todo caso, si las exportaciones del sector vitivinícola con vetadas por Moscú, Arroyo ha avanzado que pedirá en Bruselas que la Comisión Europea "tome medidas para ayudar al sector", al igual que sucedió con las frutas y verduras en 2014.

En cuanto a las importaciones, Arroyo ha considerado que el conflicto "no va a afectar" a la entrada en España del cereal procedente de Ucrania, que "se va a seguir produciendo como hasta ahora".

No obstante, ha indicado que "si hay menos producto en el mercado de un país tan importante como Ucrania, no tiene que perjudicar a los agricultores de Castilla-La Mancha", que probablemente "van a tener mejores precios".

"Venimos de un año en el que el precio de los cereales en el mercado internacional ha batido récords históricos", ha dicho sobre el cereal, algo que "ha beneficiado mucho" también a los cerealistas castellanomanchegos.

En todo caso, Martínez Arroyo ha pedido prudencia, ya que "hay que esperar", porque "es una cuestión muy compleja -ha insistido- y el mercado de los cereales es, además, hipercomplejo porque es un commodity, cuyo precio se establece en los mercados de futuro de Chicago y de Londres y que es ajeno a las decisiones que se puedan tomar aquí por parte del sector".

Comentarios