De la negación al "circo" de Vox sobre la violencia machista, o cómo usar un asesinato para crear dudas sobre la protección

Tras el triple crimen de Las Pedroñeras, la formación ultra en Castilla-La Mancha arremete contra el pacto de estado y un sistema que a 31 de mayo tenía 4.960 casos activos en la región, de los cuales más de 2.500 con protección policial.
Homenaje a las tres víctimas de la violencia machista en Las Pedroñeras (Cuenca).
photo_camera Homenaje a las tres víctimas de la violencia machista en Las Pedroñeras (Cuenca).

TOLEDO.- El crimen machista ocurrido en la localidad conquense de Las Pedroñeras el pasado fin de semana, donde una mujer y sus dos hijos menores fueron asesinados por su expareja y padre de los niños, ha sido utilizado como excusa por Vox para calificar de "circo" la violencia de género y el sistema de atención a las víctimas.

Un "atroz" asesinato que si bien han lamentado y condenado, consideran que pone de manifiesto que "algo está fallando", el "entramado político e institucional" al que cada año se destina "más dinero, más recursos" y tiene como resultado "más muertes".

Argumentación que desplegaba apenas 48 horas después de conocerse el triple asesinato, el portavoz de la formación ultra en las Cortes, Iván Sánchez, quien defendía que "si la Justicia no hubiera fallado, en diez años de denuncias" el responsable de estas muertes "debería haber estado deportado en su país".

Y es que para Vox el sistema en sí parece ser el responsable de estas muertes de la violencia machista. "Tenemos que sentarnos a reflexionar a ver qué es lo que estamos haciendo, porque algo estamos haciendo muy mal", defendía Sánchez en rueda de prensa, antes de criticar que "se destine cada año más millones de euros y el resultado sea esto: que cada año hay más muertes".

Sistema de Seguimiento Integral en los casos de Violencia de Género (Sistema VioGén) en el que a fecha 31 de mayo, tenía 4.960 casos activos de violencia machista en Castilla-La Mancha, de los cuales 51 con nivel de riesgo alto y 1 de nivel extremo. Del total de casos, 2.527 víctimas contaban con protección policial, según los datos publicados por la Secretaría de Estado de Seguridad del Ministerio del Interior.

Para el parlamentario ultra, en este caso de Las Pedroñeras "han fallado diez años de denuncia, el sistema de las órdenes de alejamiento, el sistema VioGén; ha fallado la Consejería de Igualdad, el Instituto de la Mujer, el secretario de Estado y el Ministerio de Igualdad. Falla el pacto de estado que hicieron PP y PSOE contra la violencia de género", aseguraba, refiriéndose también a este como "circo".

Un planteamiento al que respondía el mismo lunes el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, quien arremetía contra quienes "dan cobertura ideológica a la violencia", al alentar desde sus posicionamientos "el fanatismo y el odio".

En este sentido, y después de que desde Vox se tratara de centrar el foco en la nacionalidad del asesino, el jefe del Ejecutivo castellanomanchego apuntaba que "intentar explicar un tipo de odio generando odio en la sociedad contra un tipo de personas es execrable".

Y es que aunque desde el Gobierno central se ha reconocido la existencia de "un problema" en el sistema de detección de casos de violencia de género tras un fin de semana negro, en el que cuatro mujeres y dos niños han sido asesinados por sus parejas o exparejas, "el sistema funciona", tal y como aseguraba la ministra de Igualdad, Ana Redondo.

Por su parte, y en concreto sobre el caso de Las Pedroñeras, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha admitido "una quiebra en el sistema" y ha señalado que se analizarán "las circunstancias concretas" para concluir "dónde ha estado la falla". Sin embargo, continuaba, esto "no puede poner en duda la calidad y robustez del sistema VioGén y la profesionalidad de los más de 43.000 funcionarios" dedicados a la protección y seguridad de las víctimas.

Por ello, pedía "a las mujeres que denuncien y confíen en nuestras fuerzas y cuerpos de seguridad del estado porque en muchas ocasiones, diría que en casi todas, es la forma de salvar la vida", resaltaba.

Violencia de género cuya existencia desde Vox se niega, situándola en el mismo nivel que cualquier otro tipo de violencia, aunque exigen explicaciones "sobre los fallos y grietas del sistema", tal y como ha vuelto a insistir Sánchez este miércoles, exigiendo a la vez conocer "qué medidas se van a tomar" para que situaciones como la de Las Pedroñeras no vuelvan a repetirse.

Y así, desde el grupo parlamentario en las Cortes de Castilla-La Mancha han solicitado la comparecencia de la consejera de Igualdad para que lo explique, pese a que algunas cuestiones sobre las que piden respuestas, principalmente en materia de seguridad, sean competencia del Estado, como la vigilancia del cumplimiento de las órdenes de alejamiento o una entrada en prisión que "se demoró lo suficiente para llegar a este triste final".

Consideran que "se ha demostrado que el sistema y la voluntad política, social y judicial fallan con resultados terribles", una situación, argumenta el portavoz parlamentario de Vox. Cuestiones que pretenden que explique la responsable de Igualdad de Castilla-La Mancha, Sara Simón, como por qué el asesino "no había entrado en prisión" si se conocía "su largo historial de violencia y maltrato". Materias relacionadas con la Justicia, sobre las que Castilla-La Mancha no tiene transferidas las competencias, o con la seguridad, dependiente del Ministerio del Interior, al no contar tampoco la región con policía autonómica.

Petición de explicaciones a la que desde Vox llegan tan solo un día después de pedir "dimisiones" en el Gobierno regional porque pese a las órdenes de alejamiento -vigilar el cumplimiento de las mismas corresponde a los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado- y estar dentro del sistema VioGén -la valoración del nivel de riesgo también se obtiene a partir de la información realizada por los agentes que instruyen las diligencias-, "nadie hizo nada".

Y es que, según Vox, "el sistema" no es capaz de proteger a las mujeres y a sus hijos frente a los maltratadores; mientras, quienes niegan por sistema la existencia de la violencia de género tratan de invisibilizar un problema que sigue costando vidas y marcando otras muchas.

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